EL SEIBO. La reparación de carreteras y caminos vecinales ha sido por décadas una de las principales demandas de los pobladores de El Seibo, situación que ahora, tras el reciente huracán Fiona, empeoró, y para transitar por estas vías se hace más factible a caballo. Zonas altamente productivas como Las Cuchillas, Mata de Palma, El Cuey, Los Corazones, Los Botados, Arroyo Grande y otras, no se resignan a las promesas de distintos gobiernos e insisten en una aparente solución utópica, pues, esto no solo afecta el transporte de las cosechas a los mercados, sino que amenazan la estabilidad de la producción agrícola.
Tras una radiografía vial de El Tiempo, es evidente el deterioro en calles del casco urbano, carreteras que comunican a esta localidad con otras provincias como La Altagracia y caminos vecinales de El Seibo.
EN EL PUEBLO
Dentro de la ciudad algunas calles necesitan asfalto, otras fueron deterioradas con la instalación de tuberías del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa) y unas están en estado de emergencia como las del sector Villa Guerrero. En este último, los moradores viven con el grito al cielo. Hasta hace poco, la Alcaldía comenzó un programa de construcción de aceras y contenes, mismo que está pausado. Tanto los del área de Puerto Rico como en la principal, desde la manzana 10 hasta la 16, transitan entre lodazales, además, los motores se ven en la obligación de subirse a la acera.
“A esta calle le llaman la rompe vehículos, porque no hay uno que no termine pinchado, enlodado o con algún problema. Cruzan de un solo lado y es un peligro para los niños, quienes a veces, salen a jugar. Muchos hoyos acumulando agua, también. Sería oportuno, un arreglito”, dice Elianna Reynoso, quien vive en el sitio. En la calle principal del barrio José Francisco Peña Gómez, una de las que mejor estaba, al pasar el tiempo, por los problemas de tuberías cloacales y aguas potables, se fue destruyendo poco a poco. Hoy su cara es otra. En la Respaldo Teófilo Hernández de Ginandiana, los hoyos sobran entre las partes asfaltadas y las que no.
SEIBO-CRUCE DE PAVÓN Y EL SEIBO-MICHES
De las carreteras que comunican a esta demarcación con otras de la región Este, la que conduce hacia el municipio de Higüey, provincia La Altagracia, precisamente, en el tramo hasta el Cruce de Pavón, es una de las peores de transitar por el daño en la capa asfáltica y los hoyos. Este tramo, de una longitud de 11.85 kilómetros, muchas veces, vehículos se cruzan a la vía contraria para evitar caer en los pronunciados hoyos o recorrer varios metros de capa asfáltica desprendida.
Esta, junto a las demás, como Hato Mayor y La Romana, era una de las que en mejor condición estaban. Fue construida con una inversión de más de 58 millones de pesos. Otra importante vía, relativamente nueva que, al pasar el tiempo, va empeorando es la carretera El Seibo- Miches, afectada por el huracán María y desde entonces, los daños se han ido percibiendo. Luego de Fiona, aunque no sufrió grandes daños, sin embargo, los deslizamientos de tierra y algunas ramas, barandas rotas, corrientes de agua en la vía y los hoyos más agigantados, la convirtieron más angosta.
MATA DE PALMA
La sección de Mata de Palma tiene dos problemas viales: la carretera principal que comunica con El Seibo, en el kilómetro 18 El Seibo-Hato Mayor por Paso Cibao. No se encuentra apta para circular, salvo que se haga en mulos o caballos. El otro problema, se da en el camino entre Mata de Palma y Los Hatillos, provincia Hato Mayor. Respecto a este último, cerca de 50 estudiantes estuvieron dos semanas sin acudir a clases en el liceo de Los Hatillos porque el autobús que los moviliza desde Mata de Palma no podía transitar, debido a la condición del camino.
En este trayecto pedregoso y de incontables hoyos deben cruzarse al menos tres badenes y dos puentes. El recorrido es de unos 40 minutos. El camino principal que conecta las comunidades de San Miguel, Mata de Palma- Los Hatillos tiene muchas zanjas ocasionadas por las fuertes lluvias del huracán, sin embargo, cada vez que llueve la historia se repite. Por otra parte, los fuertes aguaceros han dañado el camino que va del Batey Haití Mejía al acceso de la escuela Cañada del Agua donde tienen más de 200 alumnos, también quedando aislada la policlínica de esta esa zona.
ARROYO GRANDE
Aquí, la situación es igual de dramática. Los grandes hoyos en el pedazo de carretera de asfalto dificultan trasladarse por esa zona. Igualmente, en el camino de tierra hay grandes zanjas y reiterados hoyos, algunos llenos de agua. Además, pasan por la dramática situación de quedarse incomunicados cada vez que llueve. “Desde antes del ciclón estamos pasando las mil y una con esto. Tenemos que romper alambres y montes para ir al pueblo por Los Botados. Desde que un gato mea, no hay quien pueda ir al pueblo. Tuvimos que sacar una enferma en un camastro halándola con soga, por Los Botados. Salimos en la tarde y llegamos casi a medianoche”, contó Félix Montas.
La comunidad refirió que de vez en cuando mandan a tapar algunos hoyos. Pidieron que les hagan la carretera y el puente de Las Dos Bocas. A la vez, los productores de Arroyo grande destacaron que producen rubros de todo tipo, cacao y frutos. “Entraban semanalmente cinco o seis camiones y se iban llenos de productos agrícolas, pero somos una sección olvidada”, resaltó José Zorrilla.
LAS CUCHILLAS
Otro de los sitios donde las vías de comunicación terrestres han sido un dolor de cabeza desde siempre, es en la sección de Las Cuchillas. Promesas y cuantiosas inversiones de dinero rodean a esta carretera, paralizada en numerosas ocasiones, los reclamos no han sido válidos. La cantidad de hoyos son incontables y cuando llueve se torna más incómoda la circulación de los vehículos y de las personas, ya que, se llenan de agua. Saul Mercedes, presidente de la asociación de transportistas de la zona, argumentó que, “está pésima y hay lugares que, si no hubiese sido porque se le hicieron arreglos a mano, no estuviéramos transitando”.
A solo dos kilómetros de trayecto se encuentran jóvenes como Pablo Mejía, quien tiene cerca de dos años yendo a diferentes comunidades cercanas a tapar los hoyos de la carretera con una pala y una cubeta. Es soldador y tiene dos niños, pero tapando hoyos se ayuda en su manutención. “En una semana vengo tres veces, depende como me vaya. He llegado hasta Piedra Blanca. Me gano algo, siempre son los transeúntes pobres que me ayudan y suplo a mis niños. Hago esto aquí y en Arroyo Grande. Hay días que me va muy mal y otros en los que me gano hasta 800 pesos”, narró el joven.
PLANES
El encargado provincial del Ministerio de Obras Públicas, Manolito Martínez, exteriorizó que la carretera de Las Cuchillas está paralizada porque tiene entendido que la autovía San Pedro de Macorís-Miches, se haría por ese lugar, por lo que, la obra tendría otro diseño. Informó, además, que se están avanzando los trabajos en las de Magarín y San Francisco Vicentillo. Adelantó que están esperando los equipos para empezar a intervenir las demás carreteras y caminos vecinales.
En torno a la polémica denuncia de que la compañía Remix, misma que ganó la licitación de 250 millones de asfalto, retiraba sus equipos, Martínez explicó que se colocó una parte y falta otra que no se ha hecho porque la planta procesadora de asfalto en Miches estuvo un tiempo dañada, no obstante, enfatizó se retomará. Mientras que, la Alcaldía señaló que están terminando el proceso de licitación pública para la compra de un grédar y dos camiones volteos, con lo cual, comenzarán con las reparaciones de las vías competentes.