Música bien subida de tono perturba docencia desde casa en sectores de El Seibo

EL SEIBO, RD. – La nueva modalidad del recién iniciado año escolar se enfrenta a otra problemática que va más allá de las dificultades de conexión y de energía eléctrica, y que les impide desarrollar el proceso educativo desde casa. Docentes y estudiantes denunciaron el alto volumen al que están expuestos por sus vecinos, situación que se prolonga, pese a algunos esfuerzos por controlar la contaminación sonora.

La docente Aleja Mena, educadora de varios años en distintos centros educativos, residente en Los Hoyitos, dijo que el hecho no solo está afectando sus labores docentes y el contacto permanente con padres y tutores, sino que perturba de igual manera a varios envejecientes del sector donde reside. Señaló, además, no hay hora fija, porque incluso, en horario del toque de queda hasta altas horas de la hora se escucha la música, entorpeciendo las horas de descanso de quienes trabajan.

Declaró que en una ocasión tenía reunión de orientación en horas vespertinas y tuvo que cancelarla, porque no escuchaba a las demás personas. Pidió a las autoridades competentes, tomar medidas al respecto. â??Necesitamos que alguien le ponga freno a la situación, porque también he escuchado en los encuentros que tenemos a varios padres quejarse por la misma situación. No tenemos sosiego, no hay empatía hacia quienes trabajamos desde casa y necesitamos tranquilidadâ?, resaltó Mena.

Asimismo, la también docente del área de Biología, Flor Mariana Silvestre, afirmó que ahora la calidad de aprendizaje de los estudiantes está siendo interrumpido por los altos volúmenes, mientras se encuentran atados de manos, puesto que los encargados de vigilar y controlar esta problemática, no toman medidas. Exteriorizó, no solo es la música sino también los motores y anunciantes.

Instó a que se realice una campaña en contra de la contaminación sonora, para ayudar a que educadores y estudiantes puedan desarrollar el año escolar tranquilos. â??La educación de nuestros estudiantes está siendo interrumpida por altos decibeles, y lo peor es que estamos atados de manos sin poder hacer mucho, y no solo es la música, también son los motores sin muffler. Hacemos un llamado para que se ejecuten medidas al respecto, y podamos terminar el año de la mejor maneraâ?, enfatizó.

Entre tanto, Loraini Masiel Taveras, estudiante de grado superior, narró que a pesar de las complejidades de la virtualidad y los constantes problemas de internet que tiene, encima debe lidiar con el â??musicónâ? de sus vecinos. Calificó como â??una zozobraâ? el hecho de que estén todos en casa, ya que se hace más difícil tomar clases por las plataformas virtuales, debido a que se hacen fiestas y actividades familiares frecuentemente. â??No hay un sólo día en que pueda concentrarme. Recientemente, la profesora me llamó la atención por el ruido, pensando que era en mi casa, y no solo son vecinos de al lado, sino también de calles cercanas o en todo el sector. No saben poner música bajita, es muy dificultoso estudiar con un dembow a todo dar. Necesitamos que nos ayuden a estudiar. Uno llama a la Policía y lo apagan, pero al rato vuelven y lo enciendenâ?, manifestó Taveras.

PROBLEMA PARA EL APRENDIZAJE

De acuerdo con la psicóloga Keila Álvarez, este es un problema social que pocas veces logra ponérsele fin, porque no hay una real aplicación de la ley. En la forma como afecta al proceso enseñanza-aprendizaje, reveló que esto interviene en la conducta de las personas e influye en la capacidad de concentración y captación, causando severas interferencias comunicativas, de estrés y agotamiento. â??Este es un problema serio y que requiere atención, sobre todo en estos momentos, donde la mayoría estamos estudiando y trabajando desde casa. En los jóvenes se pierde capacidad cognitiva y se sufre de falta de concentración, problemas de sueño y dolores de cabeza