Parque improvisado en El Seibo se convierte en espacio de recreación para cientos de niños

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EL SEIBO. Uno de los derechos fundamentales de los niños, niñas y adolescentes es el disfrute al deporte, el tiempo libre y la recreación, y es obligación del Estado proveérselo. Este derecho está contemplado en el Código para el Sistema de Protección y Derechos Fundamentales de Niños, Niñas y Adolescentes, Ley 136-03, pero no todos tienen acceso a disfrutar del mismo. Los sectores José Francisco Peña Gómez (Villa Guerrero nuevo) y Villa Guerrero (viejo), forman parte de los más poblados y empobrecidos de El Seibo, en especial este último.

En ninguno de los dos existen espacios de recreación y esparcimiento. Tienen como única alternativa los lugares que quedan en el centro del pueblo o, el parque infantil que queda al otro extremo del municipio.

Sin embargo, la urbanización José Francisco Peña Gómez, un proyecto habitacional construido hace unos 20 años por el gobierno de turno, cuenta con un terreno que casi no ha sido aprovechado para este fin. A la fecha no ha sido tomado en cuenta por ninguna institución o autoridad competente. A pesar de eso, los niños no dejan de frecuentarlo y usan un tubo viejo como juguete, para subirse cada tarde.

Este lugar se ha convertido en un parquecito improvisado. En el 2004, cuando comenzó la urbanización del sector, motivados por la necesidad de un espacio infantil los residentes decidieron adecuar el terreno. Lo limpiaron, reforestaron y colocaron bancos y tubos con cadenas para formar una especie de columpios que, perdieron su forma con el tiempo.

“Eso estaba arrabalizado y junto a vecinos cercanos le dimos mantenimiento. Entre todos compramos los blocks, el cemento y de un parque que estaban destruyendo tomamos los bancos. Todo eso, para que los niños del barrio tuvieran donde recrearse. En todos los proyectos debe haber un espacio para esto”, señaló Francisco Álvarez, quien vive en frente y comenzó las gestiones en su momento.

A la vez, Álvarez enfatizó en que este sitio es ideal para los infantes de ambos sectores, ya que el único parque infantil se ubica al extremo y, los más pobres no pueden movilizarse ni atravesar la ciudad, en cambio, este le quedaría más cerca. Además, pidió evitar que el sitio sea objeto de invasión.