EL SEIBO. Cada 10 de octubre se celebra el Día Mundial de la Salud Mental, con el objetivo de sensibilizar sobre los problemas relacionados con esta enfermedad y movilizar esfuerzos para ayudar a afrontarla. En el país, la salud mental continúa siendo un tema de segundo plano. Estudios demostraron que la pandemia de la Covid-19 visibilizó y sacó del cuarto oscuro donde se aguardan las enfermedades mentales, y expertos coinciden en que, en la postpandemia incrementaron los trastornos de ansiedad, depresión y violencia social generalizada.
CONSULTAS/ CENTRO REGIONAL
De acuerdo con el Repositorio de Información y Estadísticas del Servicio Nacional de Salud (SNS), hasta agosto de este año en los hospitales de la región Este se realizaron 7 mil 238 consultas de psicología y cuatro mil 583 de psiquiatría, una cantidad superior al mismo período del año anterior, donde solo tres mil 315 consultas de psicología se llevaron a cabo. Especialistas de la salud mental y de la medicina en la región Este consideraron que se hace necesario un espacio para tratar las enfermedades mentales y recluir a los enajenados de las calles.
En El Seibo, Arelis Mejía, encargada de atención directa al usuario en el departamento de Salud Mental del hospital Teófilo Hernández, dijo que las consultas aumentaron considerablemente. Mejía agregó que diligencian, por su lado, un centro de día, para que funcione en esta provincia, donde se puedan recibir a los enajenados todas las mañanas y sean devueltos en las noches. Destacó que en el hospital solo tratan las emergencias. “Tenemos la gran dificultad de que cuando hay una emergencia, debemos poner al paciente en espera y llamar a ver en qué parte del país aparece una cama. No hay unidad de atención en crisis”, señaló.
No obstante, el psiquiatra Juan Santana, afirmó que es necesaria la presencia de lugares donde atender pacientes psiquiátricos, porque la modernidad de la psiquiatría se basa en cerrar los manicomios. “Lo que se está haciendo hoy día, lo moderno, es que hospitales deben tener camas habitadas y dar esos servicios igual que otras áreas de la medicina”, expone. El galeno afirmó que, una de las grandes preocupaciones es que hay una carencia de psiquiatras, puesto que la mayoría están empleados, lo que complica más el servicio de estos profesionales en los hospitales.
“Lo que sí debe existir en la región, es una unidad de intervención en crisis, estas deben estar en los hospitales como el Antonio Musa con 10 camas”. En ese sentido, explicó que en la región no tienen esa unidad. por lo cual, se debe aspirar a que haya una, tomando en cuenta que sería necesario un personal que incluya siquiatras, enfermeras especializadas, psicólogos, trabajadores sociales, camisas de fuerzas, medicamentos y demás. “A los crónicos, los que andan deambulando en las calles, es diferente, tienen síntomas negativos y algunos forman parte hasta de un problema social. Aquí hay una buena intención y es que se piensa hacer un centro de rehabilitación sicosocial, parecido al antiguo 28. Estamos empujando para que ocurra”, explicó el doctor.
El director regional del Servicio Nacional de Salud (SNS) Ricardo Romero, dijo que un hospital regional implicaría muchos recursos, humanos y económicos, por lo que desde el SNS se están habilitando unidades poco a poco para tratar a pacientes dándoles la primera atención dentro de los centros.