EL SEIBO. Desde muy temprana edad el seibano Dorny Romero tenía claro que el fútbol era una atracción y aunque lo percibía como una afición, más adelante se convirtió su profesión que, desarrolla en la actualidad en Bolivia jugando su segunda temporada con el Real Santa Cruz, con quien dice estará hasta finales de este año.
“A sinceridad nunca imaginé tener una carrera profesional en el fútbol, no pensé tampoco tener una carrera internacional porque lo veía como recreación, pero, ahora estoy jugando aquí (Bolivia) donde he tenido una experiencia maravillosa”, dijo Ramero.
La carrera deportiva del futbolista que mide 1.73 de altura y un peso 62 kilogramos, tomó giro profesional en la Liga de Expansión de México, con Venados Fútbol Club Yucatán, en 2020, con ayuda de Jacques Passy, entrenador de la Selección Nacional. Agregó que luego de terminar su contrato con el Real Santa Cruz tiene planes de seguir con la carrera internacional.
DONDE FINALIZÓ EL BÉISBOL…
Participación de Dorny Romero con la Selección Nacional de Fútbol.
La capacidad para Romero anotar goles le ayudó abrirse camino rápidamente, permitiéndo fichar con Delfines del Este en 2017. La participación del artillero, en este club y en Cibao Atlético fue lo que lo llevó a formar parte de Cibao FC con quien exhibe dos victorias en la Liga Dominicana de Fútbol (LDF). La primera de ellas, que el equipo se coronó en 2018 campeón por primera vez y la segunda, que 2019 fue elegido jugador del partido.
“En estos años dejé de ver el fútbol como amateur, lo empecé a ver como mi profesión, aprendí muchas cosas que no sabía hasta ese momento porque en mi casa no me permitían jugarlo “, dijo el atacante.
Y es que su padre, Pedro Antonio Romero, hasta antes del futbolista cumplir los 14 años no le agradaba la idea de que juegue este deporte, sino que su anhelo era convertirlo en un pelotero de grandes ligas. “Mi hijo empezó a jugar fútbol a los 14 años, viene del béisbol con una trayectoria linda porque tiene muchas condiciones para una filma”, afirmó.
Asimismo, explicó que, “el fútbol generó en él una gran pasión, a los 16 años pudo dar el salto al profesionalismo. Siempre supe que le gustaba este deporte, reconozco que es bueno, me siento orgulloso de saber que Dios me dio un hijo lleno de cualidades y a la vez siento orgullo porque representa al país.
OLÍMPICA SUB-23, LDF Y RECONOCIMIENTO
Romero, además, en el país, pertenece a la Selección Olímpica sub-23. Aquí, ha anotado 5 goles en igual cantidad de compromisos. Entre es- tos, ha disputado dos partidos amistosos contra la Selección Mayor de Cuba, siendo el encargado de los go- les iniciales en ambos juegos, mientras que los tres restantes encuentros fueron oficiales.
En la primera fase del Torneo Preolímpico anotó 3 goles y una asistencia, por lo que se consideró como uno de los máximos golfistas del grupo. Por su parte, con la LDF además de tener un campeonato, figura con el subcampeón LDC apertura 2019, campeón de clausura y subcampeón del Super Campeonato LDF. En el torneo apertura de la temporada de 2019 de la LDF, el seibano anotó 4 goles. Ese mismo año consiguió el primer hattrick profesional.
“El 2019 es el mejor año de mi carrera, tanto en Cibao FC y en la Selección porque cogí otro precio y me di a conocer más de lo que ya se me conocía en el fútbol dominicano”, añadió.
El mes pasado fue uno de los deportistas que la Alcaldía de El Seibo declaró hijo distinguido. “Me sentí orgulloso, aunque por mi compromiso fuera del país no pude estar presente; es algo que de por si no se esperaba porque allá (El Seibo) es difícil el apoyo a los deportistas”, dijo Romero.
