Romayra Morla / Juan Bautista RodrÃguez / redaccion@editorabavaro.com
HIGÃ?EY. Debido a las fuertes lluvias caÃdas en los últimos dÃas, en este municipio hubo más de 500 casas inundadas y evacuaciones de cientos de personas que residen próximo a las riberas del rÃo Duey-QuisibanÃ. También la agricultura sufrió graves daños.
El gobernador de la provincia La Altagracia, Ramón Güilamo Alfonso, sostuvo que la lluvia caÃda en los últimos dÃas causó pérdidas en el sector agropecuario, especÃficamente en el distrito municipal de Las Lagunas de Nisibón.
Señaló que el proyecto arrocero de los Maicillos y el sector Alemán, sufrieron daños alrededor de mil 700 tareas de arroz en producción y mil 500 tareas de habichuelas, por los desbordamientos de los rÃos Maimón de Las Lagunas de Nisibón y El Yonú.
Igualmente, expresó que las lluvias causaron destrucción de más de seis viviendas que se derrumbaron, donde los inquilinos y dueños perdieron sus ajuares al erosionar la tierra por el exceso de agua del rÃo Duey.
Además, dijo que quedaron bloqueados varios caminos vecinales que comunican a las comunidades de Anamuya-Bonao e Higüey-Anamuya, por el desbordamiento del rÃo Anamuya que sobrepasó sus lÃmites por encima del puente.
En La Cruz de Isleño hubo derrumbe de varios árboles que obstaculizaron el paso, pero fueron retirados por las brigadas de la Defensa Civil, el Cuerpo de Bomberos y empleados de la Junta Municipal de La Otra Banda.
Güilamo Alfonso, puntualizó que se mantendrán en vigilancia permanente ante los fenómenos atmosféricos que afectan al paÃs en estos meses, para tomar las medidas de prevención necesarias que permitan proteger vidas de seres humanos y de animales.
El representante del Poder Ejecutivo en La Altagracia informó que por disposición del presidente de la República, a través del Plan Social de la Presidencia, repartieron decenas de raciones alimenticias a las personas afectadas por las lluvias e inundaciones.
 Efectos
De acuerdo a las informaciones suministradas por el vocero de la Defensa Civil en Higüey, Rafael Núñez (Chucho), las lluvias dejaron en la provincia La Altagracia alrededor de 598 casas inundadas, de las cuales 150 pertenecen al sector El Obispado; 75 en La Florida; 30 en La Pangola; 55 en Villa Palmera; 150 en Los Sotos abajo; 57 en Haità Chiquito; 45 en Villa Esperanza; 10 en Los Platanitos; 20 en Barrio Lindo y seis en Aguadilla, del sector Villa Cerro.
También, expresó que fueron desplazadas a casas de amigos y familiares unas 850 personas. Mientras que en el municipio de San Rafael del Yuma se reportaron varias comunidades inundadas e incomunicadas, entre ellas el camino vecinal de Los Negros, en Jobo Dulce, y la localidad de MarÃa Ruiz, camino a La Romana.
Por otro lado, la Dirección Provincial de Salud Pública comunicó que cuando disminuyan las lluvias habrá una jornada de vacunación en los diferentes sectores, sobre todo en los lugares más vulnerables para evitar un brote de leptospirosis, malaria y enfermedades infecciosas.
 Familias afectadas
En el sector La Gallera de Higüey, producto de la crecida del rÃo Duey, la señora Mónica Yan narró que su vivienda fue destruida por los aguaceros, que también se llevaron todas sus pertenencias. Dijo que es madre soltera de siete hijos.
Yan expresó con rostro de angustia y desesperanza, que â??no tenemos hacia dónde ir; estoy en la calle con todos mis hijos, quienes hoy no tienen techo, ropa, uniformes para la escuela, comida, zapatos, una cama para dormir. No tenemos nada para sobrevivir. Pido a las autoridades y a las personas que puedan, me ayuden con cualquier cosaâ?.
Mientras que la joven Juana Castillo, del barrio Los Soto abajo, dijo que en tiempo de lluvia se ven obligados a estar en alerta, a subir las camas en la mesa para que no se mojen. Sin embargo, considera que hay familias que no les da tiempo siquiera de actuar con anterioridad y se les dañan sus ajuares.
En tanto que la señora Marcela Melo, residente en el sector El Obispado, expresó que con la crecida del rÃo Duey, que pasa por detrás de su casa, perdió varias gallinas y ropas. Además, indicó que â??esto es lo único que tenemos y no nos podemos ir; aquà vivimos desde antes del ciclón Jean. Es decir, hace más de 12 añosâ?.
