BÁVARO. Desde hace aproximadamente una semana, se ha incrementado de manera significativa la presencia del sargazo en toda la costa del Distrito Turístico Verón-Punta Cana.
Este martes las playas de Bávaro, las más visitadas por los turistas que vacacionan en esta demarcación, lucían en su orilla con grandes cumulos de esta alga.
El sargazo es una especie de algas color parduzco que no están sujetas al fondo marino, sino que flotan en la superficie del mar y que llegan a las costas de manera masiva, afectando los ecosistemas, el turismo y hasta la salud de los bañistas.
Las algas son consideradas macroalgas del género sargassum, tipo holopelágico, lo cual significa que pasan toda su vida flotando en el mar.
Originalmente se creía que provenían del Mar de los Sargazos, zona ubicada en el océano Atlántico norte muy cerca del denominado Triángulo de las Bermudas, demarcación conocida por las misteriosas desapariciones de aviones y buques que muy pocas veces han sido localizados.
Sin embargo, investigadores de los Estados Unidos de América han confirmado que las algas proceden de una nueva zona denominada Región de Recirculación del Noroesta del Ecuador, conocida por sus siglas en inglés NERR, ubicada al norte del Ecuador entre África y el Brasil.
Cada año, la presencia del sargazo pone en apuros tanto al sector turístico como al Gobierno, quienes en conjunto unen esfuerzos para minimizar los impactos en las playas de la zona turística de Verón-Punta Cana, las más visitadas por los turistas que vienen a República Dominicana.
Los hoteleros se están preparando para construir barreras que detengan la invasión del sargazo en las orillas de la playa, cuya alga además desprende un olor desagradable y también liberan ácido sulfhidríco, lo que las hace sumamente tóxicas.
El pasado 13 de diciembre, cuando el presidente de la República, Luís Abinader, estuvo en intensas reuniones con representantes del sector turismo, se aprobó la cantidad de US$2.8 millones para la construcción de una barrera que ayude a mitigarlo.
El propio mandatario constató la situación del sargazo en las playas de Bávaro, donde anunció acciones para reducir el impacto significativo que puede generar el alga en la actividad turística.