VERÓN. A partir del próximo mes de enero se iniciará un plan piloto en el Distrito Nacional para comenzar a sacar a los niños y niñas que trabajan en los semáforos y en otras localidades de la ciudad.
Así lo informó la primera dama de la República Dominicana, Raquel Arbaje, quien manifestó que “lo más importante es brindarle acompañamiento psicológico a los niños y niñas y garantizarles sus derechos, cuando sean sacados de las calles”. De acuerdo a la primera dama, el Ministerio de Educación (Minerd), cedió el Hogar Escuela Nuevo Amanecer, donde, gracias a su gran amplitud, serán divididos por sexo.
«Eso conlleva proteger sus derechos, también un trabajo conjunto con Migración y una serie de instituciones, pero ya se han ido avanzando los trabajos», indicó Arbaje, quien también expresó que, en cuanto a los niños de nacionalidad haitiana, se elaborará un protocolo a seguir al junto de Migración.
Con este plan, la primera dama busca disminuir o eliminar la gran cantidad de niños abandonados en las calles y rescatar a aquellos que son sometidos a trabajos forzosos e injustos a temprana edad.
El pasado mes, la primera dama dominicana, el Ministerio de Educación (Minerd) y el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani), firmaron este un acuerdo de colaboración para crear un hogar escuela que acoja a niñas, niños y adolescentes en esta situación.
“Hoy damos un paso más en el camino de la recuperación del porvenir de niños y niñas que, en sus condiciones actuales, no tienen ninguno. Gracias a este recinto caminarán de ahora en adelante en un mundo que les será menos hostil y les brindará la protección a la que tienen derecho”, sostuvo Arbaje durante la firma del mismo.
Mientras que el ministro de educación, Rafael Fulcar, apuntó: “Hoy ponemos en práctica el discurso de in- clusión, con un hogar digno, seguro y estable para nuestros niños y niñas en situación de calle. En el Minerd estamos implementando el modelo educativo “Educación para Vivir Mejor”, que tiene como uno de sus pilares la inclusión e igualdad de oportunidades para todos, por eso esta firma marca un hito para los niños y niñas en situaciones vulnerables”.
ANTECEDENTES
Para el año 2010, según los datos del Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani), República Dominicana carecía de mecanismos claros para manejar la problemática de los niños en las calles, y el 13% de niños y niñas dominicanos realizan algún tipo de trabajo.
Las cifras están registradas en la Oficina Nacional de Estadística (ONE) en ese año, tenían como fuente la En- cuesta Nacional de Hogares de Propósitos Múltiples ENHOGAR-MICS 2014, realizada por esa institución, con el apoyo técnico y financiero del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
Según la encuesta, el mayor porcentaje de niños y niñas que participaron en actividades económicas, durante la última semana de la encuesta, se aprecia en el grupo de edad de 15 a 17 años con un 27% en la zona urbana y un 31% en la rural. En el segmento de edad de 12 a 14 años trabajan un 17% en el área urbana y un 27% en la rural y, para los infantes de 5 a 11 años, es de un 8% en la zona urbana y un 10% en la rural. La participación de la población in- fantil en alguna actividad económica también se desagrega por regiones de residencia.
En ese orden, El Valle registró la mayor cifra de niños dedicados a alguna labor, con un 45 % en edades de 15 a 17 años; un 34 % infantes de 12 a 14 años y un 14 % menores de 5 a 11 años de edad. Mientras, Valdesia con 21 % fue la región con menor cantidad de niños y niñas entre 15 y 17 años que laboran.
