PINCELADAS. ERNESTO RIVERA (DUKE)
Uno de los más honorables hijo de Higüey lo fue el Prócer, Benemérito de la Patria Don Eustaquio Doucudray.
Nacido en esta villa en el año de 1845, fue su padre don José María Doucudray, distinguido caballero franco-suizo; su madre doña Crispina Villavicencio. Desde muy joven se distinguió don Eustaquio por su seriedad y honradez. Caballero honrado y prestantísimo, lo llamó el Arzobispo Meriño en el nombramiento que le hizo como Tesorero del Santuario de Higüey. Fue un destacado soldado de la Restauración; alcanzó todos los grados en la carrera de las armas y ocupó múltiples cargos dentro de esa actividad, reputado como hombre de honor. Figuró entre los legionarios de la Restauración en las tropas del general Adón Silvestre. Fue cabo del Batallón de Higüey en 1865 y alcanzó el grado de General de División.
Jefe Comunal de Higüey en los gobiernos de Billini, Heureaux, Jiménez y Nouel, estuvo durante dos años como Jefe de las fuerzas destacadas en la Fortaleza Ozama, de la capital. Dice el doctor Vetilio Alfau: “Don Eustaquio posee un talento natural y una cultura apreciable; es un fervoroso amante de la lectura y un gran admirador de los Fundadores de la Nacionalidad.
Honestamente pobre, con la frente erguida y la conciencia limpia penetró en los apacibles dominios de la ancianidad. Su vejez, rodeada del respeto y la estimación nacida de su virtud se deslizó apacible en la misión de Guardián del Santuario de Nuestra Señora de la Altagracia. De su unión con su esposa doña Juanica Chalas tuvo varios hijos entre los que descollaron los Abogados y Poetas Félix Servio y Humberto; así como su hija Quintina, la que fuera inmortalizada por la musa del más grande de nuestros poetas José Audilio Santana.
Murió en 1940 y sus restos descansan en el Viejo Santuario del que fuera fiel guardián, frente a la capilla del Crucificado a la derecha de la puerta del Perdón.
La calle que honra su memoria se encuentra en la parte Sur de la ciudad y corre de Este a Oeste. Iniciándose en el barrio Savica cruza la Constitución, la José Audilio Santana, la Hermanos Trejo y va a terminar en la Hicayagua, en el barrio San Martín de Porres.