viernes, noviembre 22, 2024
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Depresión estacional

Los episodios depresivos son uno de los mayores problemas con los que los profesionales nos encontramos en nuestra práctica clínica diaria. Algunos de estos episodios depresivos siguen un patrón estacional, ocurriendo en invierno, con cambios a periodos de eutimia o manía en primavera o verano.

Estos trastornos del estado del ánimo con patrón cíclico estacional han sido llamados Trastornos Afectivos Estacionales. El cambio climático, que se ha agudizado en las últimas décadas, ha provocado una ola creciente de pacientes diagnosticados con esta condición y muy posiblemente muchos más aún sin diagnosticar, por lo que se hace pertinente ejecutar medidas encaminadas a disminuir los efectos del cambio climático, porque además de los daños que este ocasiona a nuestro planeta, también provoca daños físicos y mentales a los seres humanos.

El trastorno afectivo estacional no se considera como un trastorno separado, sino que es un tipo de depresión que se caracteriza por su patrón estacional recurrente, con síntomas que duran entre 4 y 5 meses al año.

Por lo tanto, los signos y los síntomas de este trastorno incluyen los que se relacionan con la depresión mayor y algunos síntomas específicos que difieren según se trate del trastorno afectivo estacional de patrón invernal o del de patrón de verano.

Los síntomas de depresión mayor pueden incluir: perder interés en las actividades que alguna vez disfrutó, experimentar cambios en el apetito o en el peso, tener problemas para dormir, sentirse lento o agitado, tener poca energía, sentirse sin esperanza o inútil; tener dificultad para concentrarse, tener pensamientos frecuentes sobre la muerte o el suicidio.

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