Romayra Morla, rmorla@editorabavaro.com;
Higüey. El 90% de las adolescentes que son atendidas en la Unidad Integral de Atención a los Adolescentes, del hospital Nuestra Señora de la Altagracia, son embarazadas.
La población de adolescentes embarazadas ha ido en ascenso en La Altagracia.
Así lo reveló la doctora Mercedes Cueto, directora de esa unidad especializada, quien explicó que entre los meses de enero y mayo han realizado 435 consultas, entre ellas 236 partos, 147 cesáreas, 132 planificaciones y 52 abortos. “No existe una cultura de medicina preventiva. La mayoría de las veces, cuando ellas vienen aquí ya están embarazadas, cuando debería ser que si están teniendo relaciones sexuales, deben venir aquí a procurar un método de planificación”, sostuvo Cueto.
Además, dijo que la cantidad de los que asisten a planificarse también está aumentando, pero de manera reducida. Explicó que están usando el método llamado “IMPLANON”, que es un implante que se coloca en el brazo, debajo de la piel y durante tres años. “Este método le impide el embarazo y a ellas les gusta eso, porque generalmente las pastillas dicen que se les olvida, que les da muchas molestias y no las quieren tomar”, apunta la doctora Cueto.
Dra. Mercedes Cueto.
Expresó que una de las consecuencias del embarazo en la adolescencia es que desde el punto de vista físico se tienen más partos prematuros; las posibilidades de abortar son mayores y que existan más infecciones, trastornos hipertensivos de embarazo y tienen un riesgo de muerte mucho mayor que si fueran adultas.
Sostuvo que en el aspecto emocional, las adolescentes sienten rechazo y el repudio de sus padres. En algunas escuelas, también las envían a las tandas vespertinas o nocturnas, por el hecho de estar embarazadas. Pero Cueto destaca que esas consecuencias negativas no solo son para ellas sino también para la criatura.
Señala que la mayoría de estas adolescentes en estado de gestación deja la escuela. Actualmente, la tasa de deserción escolar por este motivo ronda el 98%. Cueto señala que eso conlleva a que ellas tengan menos oportunidades de conseguir un buen trabajo.
Expresó que muchas son madres solteras, lo que provoca que su futuro hijo tenga escasas probabilidades de tener una niñez feliz. Algunos estudios demuestran que los hijos de madres solteras son más propensos a caer en drogadicción y delincuencia, porque no tienen un hogar que les provea una formación de carácter equilibrado y sano.
La Unidad Integral de Atención a los Adolescentes, del hospital Nuestra Señora de la Altagracia, es un programa estatal apoyado por el Ministerio de Salud. También hay instituciones internacionales que colaboran con esta iniciativa, como la Embajada de Corea en el país, que a través de la Agencia de Cooperación Internacional envía equipos y enfermeras que trabajan de manera voluntaria durante dos años.
