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BRASIL. La Corte Suprema de Brasil (STF, siglas en portugués) decidió quitarle temporalmente, al juez del gigantesco escándalo de corrupción en Petrobras, las investigaciones sobre el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva que habÃan sacudido al paÃs.
El fallo de la corte confirmó la decisión provisional que habÃa tomado la semana pasada uno de sus magistrados, reclamándole los autos sobre Lula al juez Sérgio Moro. Sin embargo, el STF aún tiene que definir qué parte de las investigaciones que involucran al expresidente quedará en su órbita y cuáles regresan a Moro, que ha conducido el mayor caso de corrupción en la historia de Brasil.
Sérgio Moro era un juez desconocido en gran parte de Brasil hasta hace un par de años, aunque ahora se encuentra en el centro de uno de los mayores escándalos polÃticos de la historia reciente de la nación sudamericana.
Hoy este magistrado de 43 años es un personaje clave en su paÃs, que puso contra las cuerdas al gobierno de Dilma Rousseff y al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva. Inspira a manifestantes que exigen la caÃda de la presidenta y divide opiniones por su modo de actuar.
Moro es el juez federal que obligó a declarar bajo custodia policial a Lula da Silva y que levantó el secreto sobre un polémico diálogo telefónico entre Lula y Rousseff. En la conversación telefónica captada por la policÃa, Rousseff le avisaba telefónicamente a Lula que le enviarÃa el acta de su designación como ministro de gobierno para usar â??en caso de necesidadâ?.
La grabación fue divulgada por el juez Moro a mediados de marzo y aumentó en algunas esferas las sospechas de que, al nombrar ministro a su antecesor y padrino polÃtico, Rousseff buscaba darle a Lula fueros judiciales especiales para evitar su eventual arresto.
En Brasil los ministros de gobierno, al igual que otras autoridades como el presidente y los legisladores, sólo pueden ser juzgados por el Supremo. La controversia ocurrió en momentos en que Rousseff lucha por su permanencia en el cargo, al enfrentar el riesgo de un juicio polÃtico
en el Congreso que ella califica de intento de â??golpeâ?.