MELVIN MINGÓ
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Finalmente los Yankees fue el equipo que ganó la puja y obtuvo los servicios del lanzador japonés Masahiro Tanaka por siete años y 155 millones de dólares. Además del contrato con el derecho de 25 años, los Yankees tienen que pagar 20 millones de dólares al equipo japonés de Tanaka, los Golden Eagles de Rakuten.
Tras dicha firma, el tapón que presentaba la agencia libre con varios jugadores de importancia empieza a descongestionarse. En los próximos días lanzadores como los dominicanos Ubaldo Jiménez y Ervin Santana, quienes han esperado toda la temporada muerta, podrían fichar con cualquier equipo. Los rumores de esta semana han sido que el equipo de Toronto podría firmar a uno de los dos serpentineros, o tal vez, a los dos. Los Azulejos están obligados a conseguir un abridor y su presupuesto no es muy alto por lo que le caería bien uno de estos lanzadores que tienen un precio promedio de 60 millones de dólares por cuatro años.
También, los Rockies han mostrado interés en Ervin Santana pero el derecho tiene que pensarlo muy bien antes de escoger el Coors Field como casa ya que en sus dos últimas temporadas le han conectado 65 cuadrangulares y como camina la bola en ese estadio de Colorado habría que multiplicar por dos esa cantidad.
Nelson Cruz es uno de varios jugadores de posición que también están a la espera de un fichaje. El jardinero viene de jugar 109 partidos y de cumplir una suspensión de 50 por violación al programa de antidopaje durante la temporada 2013.
Su carrera ha sido mermada por las lesiones, pero Texas ha mostrado agradecimiento por algunos buenos momentos que Cruz les ha generado.
Muestran interés de firmarlo pero en el listado de prioridades Nelson Cruz no encabeza la lista.
Sólo hay que esperar, esta semana será muy activa. A partir del mes de Febrero inician los campos de entrenamientos para lanzadores, receptores y otros jugadores de posición que quieran integrarse temprano.
Mientras tanto, las firmas de Clayton Kershaw, Robinson Canó y Masahiro Tanaka seguirán como metal que resuena en las ciudades de sus respectivos equipos y como las más coloridas banderas que se izaron en la temporada muerta.
LO BUENO
La mayoría de los Jugadores dominicanos han asegurado contrato para la próxima temporada.
LO MALO
Se achican los presupuestos de los equipos y al pasar los días las sumas ofrecidas son menores.
