Verón. Hoy se conmemora el 177 aniversario de la Batalla del 30 de marzo, un gran enfrentamiento en el que las tropas dominicanas obligaron a los soldados del general haitiano Jean Pierrot a retirarse del país.
En este combate encabezado por los generales José María Imbert y Fernando Valerio, el joven ejército independentista venció nuevamente al ejército haitiano, el cual había invadido la República tras su derrota en la batalla del 19 de marzo, en Azua.
Al mediodía del 30 de marzo, se iniciaron los combates, con una carga haitiana, por el lado izquierdo dominicano que defendía el Fuerte Libertad, la cual fue rechazada.
Los experimentados antagonistas acometieron de nuevo, pero fueron repelidos por la artillería criolla. Otra vez los foráneos arremetieron y resultaron atacados vigorosamente.
Previo a la batalla del 30 marzo producida en Santiago en 1844, los aguerridos dominicanos realizaron un proceso de preparación que consistió en obtener dinero para la compra de armas.
Gracias a la asistencia del Padre de la Patria, Matías Ramón Mella y Pedro de Mena pudieron obtener donativos de personas acaudaladas de Santo Domingo y Santiago.
El presidente haitiano Charles Herard dispuso que una imponente invasión miliar, encabezada por él mismo penetrara a territorio dominicano con el fin de mantener la unidad de la República Haitiana sometiendo a la obediencia a los hispanos del Este.