PUNTA CANA, RD. RE-leaf PAPER surge como una idea escolar de Valentyn Frechka, un estudiante de 16 años de una escuela rural de Ucrania, para frenar la tala de árboles. El proyecto consigue obtener celulosa de alto rendimiento a partir de hojas caídas como material para la producción de papel.
La idea surgió en el año 2017 cuando Valentyn Frechka, caminando por los bosques y buscando constantemente formas de evitar su tala, llegó a la conclusión que las hojas caídas de un árbol podían servir como fuente para la producción de papel.
Después de 4 meses de trabajo y de una serie de experimentos, en otoño de 2017, se presentaron los prototipos de papel. En ellos ya se podía escribir, dibujar, imprimir y que tenían un buen desempeño físico y mecánico.
Producción de papel para infinidad de envases En septiembre de 2018, el proyecto pasó del laboratorio a una empresa industrial. Allí se realizaron varias pruebas hasta que en el 2019 se esbozó la fórmula final para la obtención de la masa y producción de papel para su implementación a escala industrial.
Además de la producción de papel, también se confeccionaron y probaron otro tipo de envases como empaques para frutos rojos, frutas, huevos, botellas, agregando papel de desecho de acuerdo a sus requerimientos.
El proceso de fabricación En primer lugar, las hojas caídas llegan a la planta de procesamiento desde parques de la ciudad, plazas y lugares donde es necesario realizar trabajos sanitarios, por eso no recolectan hojas de los bosques.
Las hojas, limpias de escombros, se cargan en un reactor químico especial, en el que, bajo la influencia de procesos físicos y químicos, se extraen fibras de las materias primas con el que se fabricará el papel. El material obtenido se lava varias veces para eliminar partículas extrañas que no se utilizan para la producción de papel.
Debido a que no utilizan componentes químicos que contienen azufre, el proceso de lavado es muy simple y de bajo costo. La pulpa fibrosa se mezcla con rellenos biológicos y luego una máquina enorme que recoge la pulpa en una lona sólida para luego secarla en rollos de papel.