SANTO DOMINGO. El geólogo Osiris de León dijo este jueves que tiene sentido y lógica ambiental el juicio social y la objeción presentada por la comunidad de La Otra Banda a la propuesta del vertedero, aún fuese este en forma de relleno sanitario controlado.
Explicó que el objetivo del decreto 62-21, emitido en febrero del presente año, es la reducción de los problemas de contaminación ambiental generados por la gestión de desechos depositados a cielo abierto en Santo Domingo Este, Punta Cana, Haina, Las Terrenas, Nagua, Samaná, Puerto Plata e Higüey.
Aseveró que no tendría ningún sentido lógico, ni ambiental, la apertura de nuevos vertederos a cielo abierto porque con ello se estarían duplicando los problemas medioambientales que se acumulan por estos vertederos.
“Cada vez que se abre un nuevo vertedero de basura se deja abandonado el viejo vertedero, por lo que de inmediato el viejo vertedero se convierte en un gran pasivo ambiental contaminante del suelo, del subsuelo y de las aguas subterráneas y se le suma un nuevo vertedero contaminante, razón por la cual siempre hemos objetado la opción de abrir nuevos vertederos manteniendo los viejos llenos de basura”, dijo De León.
También explicó que la zona turística de Punta Cana-Bavaro, representa el principal patrimonio turístico nacional y de la región caribeña debido a que ya cuenta con las de 42 mil habitaciones hoteleras y con indicaciones de ser el turismo con mayor proyección de crecimiento en toda la región y depende exclusivamente de aguas subterráneas.
Señaló que dichas aguas dependen de 150 pozos perforados en rocas calizas coralinas y porosas que se recargan con las lluvias gracias a un drenaje vertical que permite que esas aguas se filtren a través de poros y huecos, por lo que es imperativo evitar poner en peligro estas aguas subterráneas que llegan a los pozos que abastecen a los hoteles de esta zona.