HIGÃ?EY. El cansancio, la frustración, la falta de equipos e insumos son parte de las situaciones que experimentan a diario el personal médico de la región Este Y a esto se suma la queja de no sentirse valorados por el Estado. Todo esto, pese al esfuerzo que hacen a diario en sus trabajos, y de que son considerados soldados de primera lÃnea en la lucha contra la pandemia del covid-19 que vive el paÃs y el mundo, por lo que tampoco se escapan de las secuelas de infecciones y muertes provocadas por esta enfermedad.
Diversos médicos que trabajan en diferentes áreas del sector Salud explican las razones por las que consideran que son poco valorados, pese al esfuerzo y el trabajo que realizan. Estos han pedido resguardo de su identidad, por lo que los nombres han sido cambiados. Carmen RodrÃguez, nombre ficticio, dijo que el horario es muy extenso, estresante, incómodo y con muchas precariedades, peleando con las manos vacÃas, limitando su trabajo, y con frustración personal al ver morir a mucha gente o no poder resolver cosas que se pueden hacer.
Aseveró que el pago no es bueno. Dice que 50,000 pesos no son suficientes para las horas y el compromiso laboral. â??No tenemos incentivos; tenemos que esperar 15 años para una antigüedad; no sirve tener maestrÃa o especialidad como incremento, como es el caso de los maestros que se les reconocen las maestrÃasâ?, expuso â??RodrÃguezâ?. Señala que â??en mi caso lo recibà con muchos retraso, pero tengo compañeros que nunca lo vieron, y otros vinieron a recibir ahora varios (salarios) juntos, pero fue hasta diciembreâ?, apuntó la galena en conversación con este semanario.
En ese tenor, Wilmer Santana (nombre ficticio), quien trabaja con pacientes de covid-19, comentó que el horario de los servicios médicos es una explotación laboral, una sobrecarga para los profesionales de la salud, los cuales viven bajo un estrés permanente. Reveló que dentro del marco de los pasantes y residentes médicos, â??ni hablar de las condiciones poco humanasâ? con que se les trata, y obligados a todo maltrato verbal, psicológico y horarios abusivos. Explicó que el salario actual de los médicos es una desconsideración a los años de esfuerzo que realizan los médicos.
Dijo, además, que el mismo dinero que reciben deben reinvertirlo en las actualizaciones de protocolos y avances de la medicina, algo que deberÃa garantizar el estado con la educación continuada del paÃs. Sostuvo que tienen la promesa del actual presidente, Luis Abinader, de un aumento salarial en junio y que espera que sea de esa manera. Sustentó que el incentivo por el trabajo que realizan frente al covid-19 â??nos los ponen retardados, y siendo honestos, el cuerpo médico del paÃs se siente agotado y bajo un estrés por la pandemia; estando en la lÃnea de acción y peligro, no percibimos esos incentivos de manera efectivaâ?.
Laura Hernández, quien es médico en una Unidad de Atención Primaria (UNAP), dijo que la gestión pasada les quedó debiendo varios meses de los incentivos, y que en el transcurso de los meses, hasta diciembre, el gobierno actual completó los pagos. Argumentó que en las UNAP trabajan ocho horas diarias y qu
e el pago que reciben no es justo, porque ahora mismo hay otras instituciones que les pagan más que a un médico, que son los que arriesgan sus vidas por salvar otras y que sólo piden un sueldo justo. Indicó que el horario es abusivo, y que cuando hagan el aumento que dijo el presidente Abinader del 30 %, las exigencias serán mayores.
MIRADA DEL CMD
El presidente del Colegio Médico Dominicano en la región Este, Francisco Soriano, dijo que el horario de los médicos en el sector público está establecido desde hace tiempo, porque se ha reiterado en acuerdos que han realizado con los diferentes gobiernos. Aseveró que hay funcionarios que quieren establecer un horario mayor que el acordado. â??El horario establecido para todos los médicos y a todos los niveles es cuatro horas diarias, de lunes a viernes, pero pasa que los médicos que están trabajando en las UNAP muchos funcionarios les quieren decir que el horario es de 8:00 a 4:00, y eso es incorrecto; eso no es asÃâ?, apuntó Soriano.
En cuanto al sueldo, indicó que todos los sectores están de acuerdo que lo que se le paga a un médico no es lo justo, pero que lamentablemente deben ir por pasos y que han ido logrando algunos avances. Entiende que en la medida del tiempo algún gobierno reconocerá la labor de los médicos y el pago que deben recibir los mismos. Comentó que se han hecho muchos estudios sobre el sÃndrome de Burnout, que es básicamente un agotamiento laboral por sobrecarga de trabajo, y que con esta pandemia los médicos están expuestos a esta situación y, por ende, pueden enfermarse.
Subrayó que el incentivo por trabajos en esta pandemia ha sido un dolor de cabeza para el Colegio Médico, porque â??eso lo que generó fue un caos, donde algunos médicos le pagaron y a otros noâ?, cómo es su caso, que asegura nunca le han pagado el incentivo, al igual que muchos médicos. La presidenta del CMD, filial La Altagracia, Cándida Cordero, expuso que el sistema público de la provincia tiene la cantidad de médicos para poder enfrentar distintas situaciones, pero no la cantidad de galenos necesarios para enfrentar la pandemia, por el incremento que ha habido en estos últimos dÃas.
Indicó que serÃa prudente que el sistema nombrara más médicos por el asunto del agotamiento, ya que hay muchos profesionales de la salud en sus casas positivos de covid-19 utilizando sus tratamientos ambulatorios. Exteriorizó que el CMD enfrentó desde el principio la situación del incentivo, y que este ha sido pagado, y a los que no habÃan recibido ese dinero se les hizo la exhortación de que se dirigieran a la dirección del hospital donde estaba trabajando, para investigar qué ha ocurrido.
La representante del CMD filial El Seibo, Yolanda Charlie, dijo que la situación de los galenos en esta localidad sigue siendo la misma, agravada por la pandemia con cargas de trabajo considerable frente a una población que no recibe orientaciones y que expone a que el personal de salud se contagie. Indicó que no posee la cantidad especÃfica de médicos activos en esta provincia, ya que cada uno tiene una jornada diferente con horario dividido. Refirió que hasta el momento no se le ha acercado ningún médico a manifestarle falta de pagos ni incentivos. â??El año pasado se nos asignó un grupo de médicos, con eso no quiere decir que sea suficiente, pero todo lleva un levantamiento, porque nada de eso se hace sin justificarâ?, sostuvo Charlie.
Manifestó que, pese a las condiciones del hospital Teófilo Hernández, los médicos ofrecen el servicio en entrega total, cumpliendo, independientemente de las pocas posibilidades con que cuenta en este centro médico carente de equipos, insumos y herramientas de trabajo. El presidente del Colegio Médico Dominicano (CMD) filial Romana, el doctor Neftalà Rijo, precisó que en dicha provincia, al igual que la región Este y el paÃs, existe un déficit marcado en la parte médica que ofrece servicios en la ciudad. El gremialista señaló que las carencias son evidentes a nivel público, tanto en el hospital traumatológico ArÃstides Fiallo Cabral como en el materno infantil Francisco A. Gonzalvo.
Mencionó que hace falta un aumento significativo en la cantidad de médicos pasantes y generales, especialistas y en las diferentes áreas de la medicina en La Romana. Rijo dijo que debido a esta necesidad de profesionales de la medicina, se están utilizando a los médicos pasantes para tratar de cubrir esta necesidad que hay de médicos generales y dejó claro que no es lo correcto. â??TodavÃa se considera el año de pasantÃa un perÃodo donde el médico debe tener un tutor, que esté con ellos ahÃ. Ya a partir del momento en que se adquiere el exequátur de ley, se puede accionar en responsabilidad civil como un médico ya calificado, de lo contrario noâ?, precisó el galeno.
El presidente de los médicos en esta localidad hizo un llamado al Gobierno central a focalizar en el tema de la deficiencia de los médicos en los hospitales públicos de la provincia de La Romana. Además de los médicos, también pidió que se aumenten la cantidad de ambulancias que ofrecen servicios en ambos hospitales, ya que sólo hay una.