PUNTA CANA. Ninguna de las provincias de la región Este ha reportado casos vinculados a la fiebre porcina, sin embargo las ventas de carne de cerdo en estas demarcaciones han disminuido y allí radica la preocupación de quienes se dedican a comercializar en este sector.
La peste porcina africana, ha sido solamente detectada en zonas de 11 provincias del país, sobre todo de la parte fronteriza. Según el reporte de la Asociación Dominicana de Granjas Porcinas (Adogranja), se estima en un 12 % la caída de la demanda en una semana, en un momento en el que apenas comienza el sacrificio de cerdos para evitar la propagación de la enfermedad en áreas aún no afectadas.
El director regional de Agricultura, Fausto Tejeda, informó que hasta el momento no se han registrado casos en ninguna de las provincias del Este, pero que igualmente se mantienen en alerta para aplicar las acciones que correspondan en caso de que así suceda.
“En la región todavía no presentamos situaciones con esto de la fiebre porcina según los reportes que hemos recibido”, dijo.
Su antecesor en el cargo, el ingeniero Aris Mora, también sostiene que el Este, hasta el cierre de esta edición, no tiene casos de la fiebre porcina. Afirma que de llegar a tener presencia en esta parte del país tendría impactos en provincias significativos en provincias como La Altagracia y Hato Mayor, que son las más productivas en crías de cerdo.
A su juicio, la carne de cerdo es la más consumida por la población después de la de pollo y res e incluso en cuanto a su valor económico es más asequible en los estratos menos pudientes.
Recomienda a las autoridades y productores de las provincias del Este implementar un cinturón sanitario basado en el constante monitoreo de cerdos, pero también una coordinación de vigilancia con el Ministerio de Agricultura en todos los puntos de salida en aquellas de demarcaciones donde ha aparecido la fiebre porcina, para evitar que incida en zonas que actualmente están libres.
En las 31 provincias y el Distrito Nacional de la República Dominicana hay una población de 754,508 cerdos, de la cual 11,871 unidades son crianzas de traspatios de esos territorios, según el director de Sanidad Animal, Rafael Núñez, del Ministerio de Agricultura, quien informó además que la cantidad de provincias afectadas por la peste porcina africana se mantiene presente en 11 provincias del país.
De acuerdo a esta entidad, la población de cerdos en el Este se compone de la siguiente manera: en San Pedro de Macorís 7,924; en La Altagracia 8,406; en Hato Mayor 7,476; en La Romana 5,964 y El Seibo 4,890.
LA ALTAGRACIA
Esta demarcación es la que más produce cerdos en toda la región Este del país. La comercialización de la carne de cerdo, convertida en tocino, carne normal, longaniza y mondongo, ha sido uno de los motores que ha impulsado la economía, más específicamente de la comunidad de Santana, del municipio de Higüey.
Solo en esa localidad se producen alrededor de 240 mil kilos de cerdos mensuales. En La Altagracia, todavía no existen reportes de la llegada de la fiebre porcina. En el Distrito La Otra Banda, el pasado jueves productores de esa demarcación se reunieron a los fines de solicitar al Ministerio de Agricultura apoyo para crear un cerco que evite que la fiebre porcina afecte su producción en la zona.
LA ROMANA
Los porcicultores y ganaderos, desde ya están sintiendo los efectos negativos de esta peste. Uno de los que está sufriendo en carne propia esta situación es Enmanuel Vásquez Silfa quien, junto a su padre, Isidro Vásquez, laboran hace más de diez años en una granja utilizada para criar cerdos, ubicada en el distrito municipal de Cumayasa en esta localidad. Los porcicultores aseguran que el comercio con la carne porcina ha menguado de forma extraordinaria.
“Las ventas han bajado mucho. Antes de esto nosotros vendíamos entre 40 a 70 mil pesos diarios y ahora estoy vendiendo RD$12 mil nada más. La gente le ha cogido miedo a eso”, dijo el joven porcicultor.
Otro de los que lamenta esta situación, es el señor José Moreno Febles, quien es el secretario de organización de la Asociación de Ganaderos de La Romana y además de esto, es el administrador del matadero municipal, donde más del 70% de los animales utilizados para el sacrificio, son los cerdos.
Moreno Febles dijo a El Tiempo que cada semana en el desolladero se reciben entre dos a tres camiones de puercos y cada uno de ellos puede desmontar para el trabajo de sacrificio entre 60 a 90 cerdos, lo que equivale a unos 200 porcinos cada siete días. Sin embargo, cuenta, que después de la aparición de la enfermedad vírica en los animales de ciertas provincias del país, la primera descarga de la semana se efectuó el pasado domingo y hasta el miércoles 04 de agosto, no habían recibido más cerdos.
“Donde nosotros nos suplimos que son de las granjas del Cibao, todavía no ha llegado la gripe porcina, pero sí ha mermado la llegada de cerdos por el temor que tiene la gente de consumirla y eso también implica una reducción en las ventas, de hecho, los carniceros se han estado quejando de que no han podido comercializar la carne”, aseguró Moreno Febles.
SAN PEDRO DE MACORÍS
En la provincia de San Pedro de Macorís, el representante del Ministerio de Agricultura, Mariano Paredes Espino, precisó que se está realizando un levantamiento y que hasta la fecha no se han detectado casos de la fiebre porcina africana, en los cerdos que se encuentran en las distintas comunidades.
En las carnicerías, los propietarios expresaron que se ha producido una disminución significativa en la venta de la carne de cerdo, destacando que la poca demanda ha forzado una disminución en el precio por libra que se está comercializando a 100 pesos por libra, bajando 10 pesos.
También el señor Ramón de los Santos, quien tiene su carnicería en la parte central de la mencionada plaza, dijo que ahora las personas están consumiendo más carne de res y pollo, por lo que esta última ha comenzado a escanear, así como un ligero aumento en el precio.
La diputada del PRD por San Pedro de Macorís, Fiordaliza Pérez, pidió al Gobierno eliminar todos los cerdos que se demuestre que están enfermos de fiebre porcina para evitar que se propague el virus que la genera.
HATO MAYOR
Desde la Asociación de Porcicultores de Hato Mayor se informó a este medio, que en esa demarcación se mantiene un “estricto” control en la población de cerdos, para evitar que llegue la fiebre porcina, sobre todo a zonas más productoras como Mata Palacio, Yerba Buena y el municipio cabecera.
Las ventas de carne de cerdo han disminuido en aproximadamente 40%, según los cálculos que ha realizado esta organización. Temen una situación parecida a la del año 2016, en la que se vieron fuertemente afectadas zonas como Los Hatillos, Santana, San Valerio, Guayabo Dulce, Mata Palacio y Yerba Buena.
“Estimamos que en Hato Mayor no tengamos un impacto significativo como en las provincias donde se han visto mayores casos”, manifestó la asociación.
Recientemente, una situación preocupante ocurrió en Mata Palacio en la, donde decenas de animales como cerdos, chivos, reses, caballos y aves estaban muriendo envenenados, supuestamente, por causa de la fumigación con productos químicos a través de drones.
Presuntamente, una empresa estaba utilizando drones para fumigar campos de caña y éstos rocían un líquido a los cañaverales de la zona, que está provocando la muerte de decenas de animales.
EL SEIBO
Vendedores de carne de cerdo específicamente en el municipio cabecera Santa Cruz, aseguraron que la disminución en las ventas las últimas semanas ha sido sustancial, a consecuencia de la enfermedad de la gripe porcina africana, aunque no se contagie a los humanos ni hasta demostrado su presencia en esta provincia hasta el momento.
Al respecto, afirmaron que, aunque bajó el costo de la misma en entre unos 20 y 25 pesos, la gente no la está consumiendo por temor. Al tiempo, criticaron que las autoridades no les hayan puesto al tanto asunto y aclarado los riesgos que implica, creándose incertidumbre sobre el tema tanto en vendedores como consumidores, por lo que, están reduciendo las compras para ventas.
Andreina Mercedes, dueña de una carnicería en el Mercado Municipal, sostuvo que a pesar de que no se vende mucho, ahora empeoraron las ventas aún más por la situación. “De un 50% que se vendía, ya no llega ni a un 20%. Nada se está vendiendo, y los derivados del cerdo aumentaron de precio ya. Ha disminuido bastante, la gente no la quiere comprar”, acotó.
CONSUMO
Para el médico veterinario, Eduardo Simó, no se debe consumir la carne de un cerdo que haya muerto por fiebre porcina. “Es difícil identificar una carne con enfermedades como está, no solo en cerdos sino también en res y pollo. Por eso es importante que los mataderos cumplan con las condiciones sanitarias requeridas, además de inspecciones y la evaluación de médicos veterinarios”, explicó Simó.
Señaló que los animales y sus viseras deben ser examinados después de la muerte para que pueda garantizarse el consumo. A su juicio, en el país cualquiera tiene una pollera o un matadero sin controles necesarios, desconociendo las condiciones en las que se encontraba un cerdo, un ganado y hasta un pollo.
Sobre la precaución, el médico veterinario recomendó estar atento al lugar donde se adquiere cualquier tipo de carne y que se vele la higiene, aunque eso pueda incrementar su valor.
