Seguro, limpio, ordenado y transitable
Cuando se nos pregunta por qué residimos en Punta Cana, normalmente, respondemos que decidimos vivir aquí porque hay energía eléctrica confiable. Pero, además de la electricidad permanente, hay otros factores deseados por los munícipes de cualquier demarcación entre los que está, definitivamente, la seguridad ciudadana, facilidad de empleo y oportunidad de negocios.
Aquí entran otros factores de la pirámide de Abraham Maslow que representa las necesidades humanas, como son las consideradas fisiológicas: respiración, alimentación, descanso, sexo…, le siguen la seguridad: física, de empleo, familiar, salud y de propiedad privada. Junto a las necesidades antes mencionadas se encuentran las de afiliación: amistad, afecto, intimidad sexual. También de reconocimiento: fama, confianza, respeto, éxito y de autorrealización: moralidad, creatividad, espontaneidad, falta de prejuicios, aceptación de hechos y resolución de problemas
No todos los factores de la pirámide de Abraham Maslow son responsabilidad del individuo. Hay algunos que dependen del país y la demarcación particular donde se resida. Porque si bien es cierto que yo, como individuo, debo procurar mis propias relaciones interpersonales, tanto como el prestigio y el sexo, no es menos cierto que la seguridad ciudadana, no depende de mí, sino de los estamentos del gobierno destinados a esos fines. Tampoco el que la ciudad sea transitable, ya que el control del parque vehicular y las soluciones viales no son mi responsabilidad.
Por todo lo anterior, sabiendo que, posiblemente, vamos a vivir el resto de nuestras vidas aquí y a propósito de que se acercan las elecciones municipales, la motivación principal para votar por algún candidato ha de ser sobre la base de propuestas puntuales que garanticen, mínimamente, un compromiso con la salud ambiental y una ciudad con un entorno seguro, limpio, ordenado y transitable.