PUNTA CANA, RD. Antes de alcanzar el estatus de actor mejor remunerado de Hollywood, título que mantuvo desde 2016 hasta 2020, Dwayne Johnson forjó su reputación en el cuadrilátero, siguiendo la tradición familiar en la WWE que iniciaron su abuelo, el Alto Jefe Peter Maivia, y su padre, Rocky ‘Soulman’ Johnson.
Aunque eventualmente dejó su carrera como luchador para enfocarse en el cine, nunca renegó de su pasado en la lucha libre. Recientemente, se unió oficialmente a la junta directiva de TKO, la empresa fusión formada por Endeavor, la entidad que gestiona Ultimate Fighting Championship, y la WWE en septiembre de 2023.
En este nuevo papel, La Roca desempeñará un papel más allá de lo honorario. Aportará «décadas de experiencia en el mundo del entretenimiento en vivo y del deporte», y con este acuerdo se convierte en el «dueño absoluto» del apodo ‘La Roca’ en un hecho sin precedentes.
A pesar de su enfoque en roles no luchadores, Johnson no se mantendrá alejado del ring, ya que se enfrentará a su primo y actual campeón del mundo, Roman Reigns, en un enfrentamiento muy esperado en los próximos meses.
«Me siento muy honrado de ocupar un asiento en esta mesa con décadas de historia que representa un legado familiar para mí. Una mesa que mi familia ayudó a construir», expresó en un comunicado público. «Estoy motivado para contribuir a la expansión global de nuestros negocios TKO, WWE y UFC como líderes mundiales en deportes y entretenimiento, mientras represento con orgullo a tantos atletas y artistas fenomenales que, día tras día, trabajan arduamente para hacer realidad sus sueños y llegar a nuestro público. He estado ahí, sigo estándolo, y lo hago por ellos».
