SABANA DE LA MAR. (Luis Carrasco/Especial para El Tiempo) El sector pesquero en el municipio de Sabana de la Mar, provincia Hato Mayor, es muy importante por ser uno de los generadores de ingresos en esta demarcación costera.
Pues día a día, son varios los padres de familia que salen en horas de la tarde, desafiando las olas del mar, y en ocasiones se enfrentan a situaciones climatológicas con torrenciales lluvias y vientos, y esto no les impide trabajar para llevar el sustento a sus respectivos hogares.
Sin embargo, los que se dedican a este oficio dicen que cuando hay buena pesca, los ingresos sobrepasan los 4 mil, 5 mil y 6 mil pesos diarios.
Arístides Guzmán, quien se gana la vida comprando langosta a los pescadores para revenderla, dijo que “de esto es que mantengo mi familia ya que no tengo empleo”. Manifestó que por el momento está paralizado, por lo cara que está la libra de langosta, que alcanza los 400 pesos la libra.
Otro que se gana la vida en la actividad de la pesca es Emmanuel Olea, cuenta con más de 20 años pescando, quien informó que se ha ganado entre 8,000 y 10,000 pesos, por lo que dijo que “siempre me gano el arroz de mi familia”.
Juan Ramón Benjamín de la Asociación de pescadores de Sabana de la Mar, expresó que “yo he criado mis hijos viviendo de la pesca. Tengo más de 40 años en esta labor”. Sostuvo que esta actividad genera unos ingresos mensuales a algunos pescadores de 70,000 a 80,000 pesos.
Esta actividad ha cambiado la vida de muchas familias que dependen de la pesca, ya que no tienen otro método de trabajo para poder subsistir.
Carlos Previsterio Payano, presidente de la Asociación de Trabajadores de la Pesca de Sabana de la Mar (Asotrapesamr), le hace un llamado al presidente Luis Abinader para que ayude ese sector. Indicó que la asociación requiere de un cuarto frío para almacenar la mercancía.
Entre las especies que los pescado- res más atrapan están el llamado comúnmente colorao, el bocayate, la cojinúa, además de los camarones.
El alto precio de la gasolina es uno de los problemas que afecta a los pescadores, ya que dependiendo el tipo de pesca salen a la Bahía de Samaná con tres y cuatro galones de gasolina, esto cuando la pesca es de cordel. Cuando algunos pescadores de arrastre van en busca del camarón salen hasta con 10 galones de gasolina.
