LA ROMANA. Ha transcurrido casi un siglo desde que culminó el conflicto armado más sangriento de la historia de la humanidad, conocido como la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), un acontecimiento en el que se estima murió al menos el dos por ciento de la población mundial, equivalente a unos 60 millones de personas para la época.
Y es que, tras concluir un siglo marcado por la violencia, la guerra y la pérdida de vidas, en su mayoría de civiles, los conflictos bélicos no han desaparecido del todo y, por el contrario, se han intensificado en el transcurso de apenas dos décadas del siglo XXI.
Este jueves 24 de marzo se cumple un mes desde que iniciara la puesta en marcha de una operación militar desplegada por el gobierno ruso, bajo el mando del presidente Vladimir Putin, acción que hasta el momento ha cobrado cientos de vidas de civiles, entre los que se cuentan al menos 63 menores de edad, más de mil heridos, y se estima que al menos dos millones de ucranianos abandonaron el país durante los primeros veinte días de la escalada bélica con Rusia.
Pero, pese a que este conflicto armado que se desarrolla en Europa del Este ha acaparado los titulares de los más importantes medios de comunicación del mundo, lo cierto es que son solo dos naciones de una larga lista de países que, en la actualidad, se encuentran en guerra por conflictos étnicos, económicos, territoriales o ideológicos, entre otras causas.
ISRAEL Y PALESTINA
Entre los conflictos más relevantes que se desarrollan en la actualidad se destacan Israel y Palestina, dos naciones que, compartiendo un territorio, viven en una constante tensión que recrudeció en mayo del 2021, cuando Israel bombardeó Gaza, en un esfuerzo por desalojar a varias familias que residen en el vecindario Sheikh Jarrah, próximo a Ciudad Vieja de Jerusalén, ocupando un territorio negociado por las Naciones Unidas mediante un acuerdo firmado en 1956.
Los enfrentamientos entre Israel y Palestina se remontan a una época de posguerra, tras la fundación del Estado israelí, en 1948, cuando decenas de familias perdieron sus propiedades en lo que se convirtió en tierra judía.
Los ataques de Israel a Palestina en 2021 costaron la vida a más de 250 civiles, dejando un saldo de aproximadamente 1900 heridos del lado palestino, mientras que las cifras en Israel fueron de 12 muertes y 340 heridos.
SIRIA
La nación situada al occidente de Asia lleva más de una década sumergida en una guerra civil que explotó en el año 2011 con la llamada “Primavera Árabe”, un conflicto que se desencadenó tras una ola de protestas y levantamientos que tuvieron lugar en Medio Oriente en contra de los gobiernos autoritarios, y que parecía ser el inicio de grandes avances en la política de la región.
A once años de iniciado el conflicto, la situación que atraviesa Siria pareciera no tener vuelta atrás, pese a la intervención militar de varios países, entre los que se encuentran Rusia, Irán y Turquía, quienes participaron en más de 17 rondas de consultas celebradas entre el gobierno sirio y la oposición, y que no registraron avance alguno en la búsqueda de la paz con los grupos terroristas que van adquiriendo fuerza en la nación.
De acuerdo con un informe de la Organización Naciones Unidas (ONU), aproximadamente el 90% de la población siria vive en condiciones de extrema pobreza.
YEMEN
Esta nación se vio sumergida en una guerra civil luego de la Revolución Yemení, que formó parte de lo que se conoce como la Primavera Árabe de 2011, un proceso que para la población representaba un cambio político que traería estabilidad, pero que empeoró tras la renuncia del presidente autoritario Alí Absalá Salé, quien ocupó la presidencia del país desde julio de 1978 hasta su renuncia en febrero de 2012.
En 2014, la nación sufrió un golpe de Estado que volvió a desestabilizarla, convirtiéndola en un campo de guerra donde se enfrentan las diversas organizaciones que buscan alzarse con el gobierno del país.
Otros conflictos armados incluyen países como Etiopía, Marruecos, Libia y Afganistán, cuyos conflictos tienen raíces étnicas, religiosas y civiles, así como la República Democrática del Congo, cuya guerra se remonta al año 1996 y se mantienen en la actualidad.
De acuerdo con la Agencia de la ONU para los Refugiados, en la cifra de refugiados en el mundo ha alcanzado un récord máximo durante los últimos dos años, con un total de 26,4 millones de personas en calidad de refugiadas, de los cuales más de la mitad son menores de edad, quienes representan el más alto número de afectados por los actos bélicos que registra el mundo contemporáneo.
