A mediados de la semana pasada, el Ministerio de Salud Pública inició una jornada de vacunación contra el cólera, que tiene el objetivo de frenar el avance de esta enfermedad por todo el territorio nacional.
La decisión de las autoridades sanitarias es oportuna y estratégica, porque pretende priorizar a grupos poblacionales vulnerables con mayor riesgo de contagio.
Registros oficiales señalan que una cantidad importante de los casos confirmados corresponden a pacientes haitianos, lo que conmina al Gobierno dominicano a ser mucho más cauteloso en sus acciones preventivas.
El cólera es una enfermedad altamente virulenta, causada por contaminación del agua y de alimentos. Ataca por igual a niños y adultos, y postergar su tratamiento médico puede poner en riesgo la vida de los pacientes de esta dolencia.
El operativo de vacunación se concentra en la capital, que es donde hasta la semana pasada se habían confirmado los 36 casos de cólera objeto de seguimiento por el Ministerio de Salud Pública. Hasta finales de diciembre del pasado año, los casos positivos de cólera eran apenas ocho.
A República Dominicana no le ha sido fácil acceder a las vacunas para inmunizar a las personas contra el cólera, por lo que cobra mucho sentido el uso razonable del primer lote de 85 mil dosis que se pudo obtener de ese fármaco.
Sin embargo, la decisión más sabia y ventajosa será siempre prevenir a tiempo, siguiendo
a pie de letra las orientaciones médicas, especialmente aquellas que aconsejan higienizar el agua y alimentos de consumo básico.