PUNTA CANA Es un impresionante árbol, que llegan a medir hasta 50 metros de altura. Su apelativo científico es Dipteryx micrantha, considerado como esencial en su hábitat; ya que sirve de refugio a muchos animales selváticos.
En recientes estudios, se han hallado ejemplares con 500, 800 y más de 1.000 años de existencia. Se trata de árboles grandes, robustos, que están en la mira de empresas forestales por la excelente materia prima de su madera.
Durante el 2021, cerca de 200.000 hectáreas fueron deforestadas en Perú. El cerco se está cerrando: cada vez la actividad de tala se acerca a la región del shihuahuaco. Muchos temen que las sierras eléctricas derriben estos árboles.
Además, es el albergue de muchas especies endémicas: guacamayas, monos, el águila arpía, etc. Tiene el mote de “gigante del Amazonas”, pero las empresas madereras parecen tenerlo en el foco de sus intenciones.
Los estudios han revelados que 68% de los shihuahuacos tienen los 500 años de existencia. Además, un 16% sobrepasa los mil años. Sin duda, deben estar considerados como parte del patrimonio natural peruano.
Se trata de uno de las especias más altas del Amazonas, ya que promedian los 50 metros y pueden sobrepasar los 60 metros. Crecen de modo lento, siendo un diámetro de 1 metro en su tronco equivalente a 700 años.
Eliminarlos implica un severo daño en su espacio natural. Son enormes, siendo refugio de muchos animales. Asimismo, controlan la humedad; logrando ascender el agua desde el subsuelo hasta sus ramas superiores.
Se añade que talar un shihuahuaco implica dejar sin refugio a una enorme cantidad de aves y muchos otros animales. Sin duda, son especies vegetales clave en la preservación de la geografía amazónica peruana.
