VERÓN. La combinación de sudor, saliva, caspa, células muertas de la piel e incluso partículas de alimentos convierten a tu cama en el entorno óptimo para que crezcan una gran cantidad de gérmenes como bacterias, hongos, virus e incluso pequeños insectos.
Un lavado adecuado y regular es fundamental para garantizar que los gérmenes no se conviertan en una verdadera amenaza para la salud. Pero ¿con qué frecuencia debes cambiar la ropa de cama? Se recomienda que laves la ropa de cama todas las semanas (o con más frecuencia si es posible).
Especialmente si pasas mucho tiempo en la cama, duermes desnudo o sudas mucho por la noche. También se recomienda cambiar las fundas de las almohadas cada dos o tres días. Toda la ropa de cama debe lavarse en temperaturas medias a altas (alrededor de 40℃-60℃) para matar eficazmente los gérmenes.
Evita sobrecargar las lavadoras y usa suficiente jabón, y asegúrate de que la ropa de cama esté completamente seca antes de usarla. Toma una ducha antes de acostarte, evitar tomar siestas o meterte en la cama mientras sudas, quita el maquillaje y evita las lociones, cremas y aceites justo antes de acostarte, esto puede ayudar a mantener la ropa de cama más limpia entre lavados.
No comer ni beber en la cama, mantener a las mascotas alejadas de las sábanas y quitarse los calcetines sucios también ayudará a mantener una buena higiene.