WASHINGTON. A medida que miles de nacionales afganos escapan del régimen talibán y buscan refugio en Estados Unidos, un grupo de oficiales de la administración del ex mandatario estadounidense, Donald Trump, han iniciado un esfuerzo por poner al Partido Republicano en contra del plan de refugiados del presidente Joe Biden.
Los ex-funcionarios han escrito columnas expresando su posición al respecto, apareciendo en conversatorios en televisión nacional y acudiendo a reuniones privadas con legisladores del partido Republicano en un esfuerzo por provocar un colapso de lo que denominan una agenda afgana por imponer una agenda de inmigración en Estados Unidos
“Es una colaboración basada en una mutua convicción”, dijo Stephen Miller, Arquitecto del presidente Trump, y uno de los más conservadores en políticas de inmigración dentro del grupo que se ha comprometido con esta causa. “Mi enfoque siempre ha sido hablar a los miembros del congreso para construir una fuerte oposición a la administración de Biden y sobre todo, el plan de refugiados”, dijo Miller.
Esta iniciativa no ha sido aceptada por todos los líderes republicanos, algunos la han calificado como “crueldad de espíritu” y en contra de los valores cristianos que juegan un rol crucial en la base del partido.
Las estrategias se basan en tácticas utilizadas comúnmente durante la administración de Trump que incluyen racismo, infundir miedo en la población y falsos argumentos.
La implementación de estas estrategias ignoran la realidad en que se encuentra Afganistán, donde aquellos que trabajaron con los norteamericanos durante el periodo de guerra están desesperados por salir debido al miedo de que el régimen talibán les castigue con la pena de muerte.
Los Republicanos están apostando a la apertura de un frente en la cultura de guerras que han estado combatiendo desde que el presidente Jose Biden resultó electo a través de la combinación del sentimiento anti inmigrante que ayudó a impulsar la política de Trump y a esparcir la insatisfacción con la retirada del territorio afgano. Por medio de este, aspiran a mantener motivados a los votantes con miras a las elecciones de mitad de término del próximo año, y así tomar el control del congreso.
Fuente AP
