En los deportes hay altibajos, como en la vida hay temporadas buenas y malas y hay atletas que se mantienen en el más alto nivel que nos sorprende cuando los resultados no se les dan. Como es el caso de Novak Djokovic, que el domingo 12 perdió la final del US Open. Novak uno de los mejores tenistas de la historia empatado con Federer y Nadal con 20 títulos de Grand Slam.
Los JJOO y el US Open no han sido las mejores competencias para Novak ya que en el primero perdió en semifinales y luego el juego por la medalla de bronce y en la reciente final se le vio perdido, falto de concentración y un poco agresivo luego de que estrellará la raqueta con el piso en varias ocasiones.
Lo destacable del tema es que Novak dio unas declaraciones luego de que otra colega Naomi Osaka alegará que sentía mucha presión en competencia. Novak comento lo siguiente “la presión es un privilegio, y sin ella no existiría el deporte profesional”, y luego de estas declaraciones no ha tenido un buen rendimiento y es que Novak no solo jugaba por la medalla olímpica y ni por el Grand Slam, también se jugaba el Golden Slam ganar los 4 Grand Slam y medalla olímpica, algo que solo ha logrado Steffi Graf, desempatar a Federer y Nadal y por último igualar al gran Rod Laver con ganar los Grand Slam en un mismo año.
Novak tiene razón, la forma en que los atletas manejan la presión es lo que los separa de ser amateur a profesional y en el alto nivel debes lidiar con millones de espectadores, redes sociales y contratos millonarios que sin un entrenamiento mental adecuado puede llevarte a tener problemas a corto plazo, como en este caso perder un título o no romper un récord y a largo plazo te puede llevar a padecer síndrome de burnout.