Con información de EFE
CARACAS. Los aguaceros torrenciales de los útlimos días han producido estragos en algunas zonas de Venezuela, particularmente en el estado de Mérida, en la región andina del país suramericano.
Allí se contabilizan ya 15 personas fallecidas, además de seis desaparecidos a causa de las inundaciones. El gobernador de ese estado, Ramón Guevara, informó de que dos de los fallecidos son niños.
Nicolás Maduro ha decretado la emergencia nacional a causa de las inundaciones, que según Protección Civil han dejado más de 8,000 viviendas destruidas y 35,000 personas damnificadas.
Los estados Zulia, Amazonas, Apure, Aragua, Barinas, Delta Amacuro, Monagas y Táchira también han resultado afectados y están en alerta amarilla. El propio Maduro ha informado de que 85 de los 335 municipios del país se han visto perjudicados por las lluvias, que han causado daños en 116 puntos en la vialidad adyacente y en 10 puentes en todo el país.
El epicentro de la catástrofe en Mérida ha sido el valle del río Mocotíes, una región agrícola que en el pasado tuvo actividad turística. El río se ha desbordado y ha inundado las calles de los pueblos de Tovar y Santa Cruz de Mora, arrastrando peñascos gigantescos de la montaña, además de enseres de las residencias desbordadas por el agua. Las accesos a estas poblaciones están bloqueados por los derrumbes y no hay servicio eléctrico, telefónico ni de internet.
Muchas personas salvaron su vida en el último minuto y perdieron todas sus pertenencias. En las redes sociales y teléfonos circularon videos en los cuales podían verse automóviles flotando por las calles anegadas. Sectores oficiales, la Gobernación del estado, organizaciones no gubernamentales y activistas civiles ya han organizado centros de acopio de ropas, medicinas y alimentos para auxiliar a las víctimas