PUNTA CANA. En esta edición del semanario El Tiempo, Bernardo Santana Páez, ex director de la Policía Nacional, respondió las 5 preguntas.
- DESDE SU SALIDA COMO DIRECTOR DE LA POLICÍA NACIONAL (2005- 2007), ¿QUÉ HA CAMBIADO EN EL ORDEN DE LA SEGURIDAD CIUDADANA?
R: Cuando llegamos a la jefatura de la Policía Nacional había una manifestación criminal alta en la República Dominicana. Encontramos 25.88 homicidios por cada 100 mil habitantes, que era de las más altas de la región. Comenzamos a trabajar, y recobramos la confianza de los ciudadanos en la Policía. Esos índices de criminalidad lo bajamos a 17 homicidios por cada 100 mil habitantes, y cuando nos fuimos lo dejamos en 10.4. ¿Qué ha cambiado? Bueno, la manifestación criminal es casi la misma. No creo que haya muchas cosas que hayan cambiado significativamente. Siempre se siguen cometiendo hechos delictivos y criminales en todos los sectores. Lo que pienso es que hay que seguir fortaleciendo la capacidad preventiva.
- ¿COMPARTE EL CONCEPTO DE ‘PERCEPCIÓN DE INSEGURIDAD’ O CREE ES UN RECURSO PARA JUSTIFICAR LA FALTA DE ACCIÓN PREVENTIVA?
R: Regularmente, las personas hablan mucho de percepción cuando están en el poder, y te hablan de que hay una manifestación grande de índices de criminalidad. Entonces, qué pasa, cuando hay un índice de criminalidad alto y la gente lo siente, no se le puede hablar de percepción. La percepción es muchas veces una herramienta que se usa para justificar algo que muchas veces no se puede justificar. La criminalidad se mide y se prueba en tasas porcentuales. Seguridad ciudadana es usted sentirse seguro, una percepción de seguridad, pero una percepción subjetiva, que el ciudadano diga, aquí yo me siento seguro. Pero una percepción real; ausencia de peligro.
- CADA DÍA SURGEN EPISODIOS QUE RETRATAN LA FALTA DE RESPECTO A LA AUTORIDAD POLICIAL ¿QUÉ HACER PARA CAMBIAR ESTA PRÁCTICA?
R: La Constitución de la República, habla de derechos y deberes. Si bien es cierto que el ciudadano tiene derechos y deberes, y que el Estado tiene que garantizarle el ejercicio de esos derechos, él tiene también unos deberes. Y el primer deber de un ciudadano es respetar la Constitución, las leyes y a sus autoridades. En ese sentido, tiene que legislarse para que se tipifique esa conducta con una sanción drástica para que se respete la autoridad, pero que la autoridad respete también a los ciudadanos. Se necesita que se estudie el caso, que se legisle sobre la materia, para tipificar esa conducta y ponerle una sanción para que se respete a la autoridad.
- SIEMPRE SE HABLA DE LA NECESIDAD DE UNA POLICÍA DE PROXIMIDAD, DE CONEXIÓN CON LA SOCIEDAD, ¿QUÉ APORTARÍA ESO?
R: Policía de proximidad quiere decir que el ciudadano es un nuevo policía que debe trabajar con la comunidad, con los grupos sociales; que garantice la seguridad del ciudadano. Entonces, para eso, se necesita un policía con una nueva mentalidad, que no sea militarista, para que sepa que su trabajo es en el seno de la comunidad, resolviéndole problemas a la comunidad, enterado de los problemas sociales, defender la paz y rescatar los espacios públicos de los que se hayan apoderado los delincuentes y devolvérselos a los ciudadanos. Muchos policías no lo entienden porque tienen una mentalidad militarista, creen que son militares, y la Policía es una institución civil. Entonces, cuando es así, la Policía se gana la confianza del ciudadano.
- ¿QUÉ CONSIDERA MÁS APREMIANTE: OTRO PLAN DE SEGURIDAD CIUDADANA O UNA REFORMA INTEGRAL A LA POLICÍA NACIONAL?
R: Nosotros necesitamos que se haga un plan de seguridad democrática, que tiene unos ejes básicos. Pero necesitamos también una reforma policial, que se empezó pero no se concluyó, porque en esos ocho años se hicieron unos planes que prácticamente militarizaron eso. Los planes de seguridad democrática no pueden ser militarizados porque los militares no tienen facultad constitucional para hacer investigación criminal, y su misión es proteger el país de una guerra. Las nuevas amenazas no son de carácter militar, son de orden policial. Estamos de acuerdo con la reforma policial, y los planes, como se hacen cada cuatro años, cada gobierno que viene tiene que revisarlo y si el plan es bueno tiene que dar seguimiento.
