A lo largo de nuestras vidas hemos tenido distintas etapas, si hacemos un recorrido a lo largo de ellas, podremos ver reflejadas las emociones de cada etapa, que a su vez se conecta con nuestro espacio físico. Si ponemos en práctica “La rueda de la vida”, una herramienta de coaching personal con aquellos aspectos que componen nuestra vida, confirmaremos que pasamos por diversos períodos, al igual que nuestra casa, ese pequeño espacio que llamamos hogar.
Cada rincón de nuestro hogar es un reflejo de cómo estamos nosotros en ese momento. Un ejemplo de ello es, si nos sentimos estancados, rodeados de un montón de cosas que no aportan nada, esto nos impedirá ver o tener tiempo para las cosas mas imperantes. Un lugar sucio y lleno de desorden no es un lugar feliz. La desorganización entorpece y estanca.
La falta de limpieza y el caos provoca depresión, ansiedad, estrés y trae confusión, afectando la parte física, emocional, sentimental, laboral, social y familiar de nuestras vidas.
Un Nuevo Aire
Renovar tu espacio es una practica que puede ayudar a revitalizar tus energías, deshacerse de todos aquellos objetos que ya cumplieron su objetivo en nuestras vidas, si ya no aportan regálalo.
Nuestro hogar es nuestro templo, debemos organizarlo de manera que refleje lo que somos en este momento y solo quedarnos con todo aquello que merece la pena para hacer que nuestra carga sea más ligera y vivir una vida en libertad. Esto nos ayudará a tomar decisiones y ser mas seguros y responsables.
Fuente: Revestida
