PUNTA CANA. Muchas personas se preguntan si es posible amar a su pareja y sentir atracción por alguien más y si esto sería una traición. Según afirma la psicoterapeuta, Ana Simó, es normal el hecho de que le guste alguien más y amar realmente a su pareja.
Asimismo, expresa en un video colgado en las redes sociales, que cuando esto ocurre la persona no debe sentir culpa, ni que está siendo desleal, ya que el sentido del gusto no se va. “Ahora lo que si se va es el usted exponerse, porque si puede sentirse atraído por alguien, pero lo que usted tiene que tener bien claro es el compromiso que tiene con su pareja”, manifiesta Simó.
Aconsejó que si le gusta alguien debe limitarse, porque está la química que es algo cerebral y por eso no debe tener contacto con esa persona, porque se siente atraído y debe recordar que tiene un compromiso con su pareja que ama y respeta.
Cita que en múltiples ocasiones le han hecho esa pregunta, principalmente del entorno laboral, al mismo tiempo que le confirman que se sienten mal por gustarles alguien más que su pareja.
“En estos casos yo le digo no, lo que te está pasando es normal, no te sientas mal, solo tienes que evitar el rose, las largas jornadas con el compañero o siempre tener a otra persona contigo para evitar pasar mucho tiempo a solas y evitar que ocurran situaciones con las que, si le estarías faltando a tu pareja”, precisa la doctora.
Por otra parte, es importante analizar si solo es atracción física o hay algo más, según indica Psicología y Mente. Es decir, primero se debe saber si la otra persona nos gusta a nivel romántico, si es atracción sexual o solamente simpatía. Argumento que coincide con el de la doctora Ana Simó e indica que es algo totalmente natural y sería diferente solo si tiene intenciones de acercamiento sexuales con quien te atrae.
UNA AVENTURA
En otros casos, algunas personas piensan que las cosas están bien siempre que su pareja no se entere. A otros no les importa si se entera y algunas relaciones pasan por dolorosas situaciones cuando su cónyuge se involucra regularmente con otras personas. En la consejería no es raro que alguien diga que no se dio cuenta de que se estaba dirigiendo hacia una aventura con un amigo o colega y que «simplemente sucedió».
