PUNTA CANA. Según los expertos, los adultos mayores deben estar tan activos como sea posible. Si es un adulto mayor, el ejercicio puede ayudarlo a vivir una vida más larga y saludable. Es seguro para la mayoría de los adultos mayores de 65 años hacer ejercicio. Incluso la mayoría de los pacientes que tienen enfermedades crónicas pueden ejercitarse de manera segura.
Algunos ejemplos son las cardiopatías, la hipertensión arterial, la diabetes y la artritis. Muchas de estas enfermedades mejoran con el ejercicio. Si no está seguro de que el ejercicio sea seguro en su caso o si actualmente tiene un estilo de vida sedentariopregúntele a su médico.
Los adultos de 65 años o más deben realizar al menos dos horas y media de ejercicio aeróbico moderado (como caminatas rápidas) por semana. En promedio, son alrededor de 30 minutos la mayoría de los días de la semana. Si no, puede hacer 1 hora y 15 minutos de ejercicio vigoroso (como trotar) por semana. También debe entrenar la fuerza al menos 2 días por semana. Puede trabajar en el equilibrio y la flexibilidad todos los días.
Además, incorpore actividad física en su rutina diaria. Si tiene más de 50 años y no está acostumbrado al ejercicio, consulte con su médico antes de comenzar una rutina. Use ropa holgada y cómoda, y calzado resistente y de buen calce.
El calzado debe contener el arco del pie y tener el talón elevado y acolchado para absorber los impactos. Asegúrese de que el calzado esté destinado al tipo de actividad para la cual lo utilizará. Por ejemplo, existen zapatos especialmente diseñados para caminar, bailar, jugar tenis o correr.
Si no está en actividad actualmente, comience despacio. Comience con ejercicios con los que ya se sienta cómodo. Al comenzar despacio, es menos probable que se lastime. Así, también previene dolores musculares.
Si siente dolor en los músculos o las articulaciones el día después de ejercitar, significa que se ha esforzado demasiado. Su cuerpo se adaptará a esto con el tiempo, pero si el dolor es demasiado incómodo, debe reducir la intensidad. Si el dolor o la incomodidad persisten, hable con su médico.