Punta Cana. Un equipo de investigadores de la Universidad de Stanford, California, ha logrado un avance significativo en la lucha contra los cánceres cerebrales infantiles, específicamente los gliomas difusos de la línea media, que hasta ahora se consideraban incurables.
En un ensayo clínico de fase 1, los investigadores probaron con éxito un tratamiento con células CAR-T, previamente eficaz en cánceres de la sangre, pero sin resultados demostrados en tumores sólidos.
Los primeros resultados son esperanzadores: el tratamiento redujo el tamaño de los tumores en 11 niños y jóvenes, restableció funciones neurológicas y, en un caso, eliminó completamente el rastro detectable del cáncer.
Este avance podría ser crucial para tratar los gliomas pontinos intrínsecos difusos (DIPG), un subtipo de tumor cerebral que afecta el tronco encefálico y tiene una tasa de supervivencia a cinco años inferior al 1%. Los tumores, que se diagnostican anualmente en cientos de niños solo en Estados Unidos, son notoriamente agresivos y de difícil tratamiento, ya que no pueden ser extirpados quirúrgicamente y los tratamientos tradicionales como la radioterapia ofrecen solo alivio temporal.
Los nuevos resultados abren la puerta a un tratamiento más efectivo que podría salvar vidas.El tratamiento desarrollado en Stanford utiliza células CAR-T modificadas en el laboratorio para que los linfocitos T del sistema inmunitario reconozcan y ataquen las células tumorales.
En el caso del DIPG y otros gliomas de la línea media, los tumores producen una proteína llamada GD2 en grandes cantidades, lo que permite a las células CAR-T dirigirse específicamente a estas células malignas. Este tratamiento innovador representa uno de los primeros éxitos en el uso de células CAR-T para tumores sólidos y ofrece nuevas esperanzas para una de las formas de cáncer más mortales en niños.