Génesis Pache  / gpache@editorabavaro.com
Verón. La zona de Verón, Bávaro, Punta Cana está compuesta por inmigrantes, personas que se trasladan desde su paÃs o región hasta aquÃ, en busca de una mejor vida y se establecen de forma temporal o permanente, llegando a crear grandes lazos y arraigos en esta localidad.
Para el XI Censo Nacional de Población y Vivienda del 2010, la cantidad de personas que en esa época vivÃan en esta zona y que nacieron aquà son unas 10,106, para un 22.98 por ciento. Las nacidas en otro municipio, pero que vivÃan aquà sumaban unas 23,769 personas, para un 54.04 por ciento. Y las nacidas en otro paÃs, pero que residencian aquà eran unas 10,107, para un 22.98 por ciento.
Las cifras indican que el 54 por ciento de las personas que viven en Verón-Punta Cana son provenientes de otras localidades del paÃs, pero que se establecieron aquÃ. Todo esto en el año 2010, cuando se realizó el último censo de población en el paÃs, lo que indica que la cifra pudo haber aumentado.
La zona resulta muy atractiva para muchas personas que vienen en busca de trabajo, por la gran cantidad de puestos laborales que existen en los diferentes hoteles y empresas. El turismo es el factor principal que hace de esta localidad una de las más atractivas para quienes desean un trabajo.
Franklin Hernández
El caso de Franklin Hernández, mejor conocido como â??La Balaâ?, es parecido al de muchos otros inmigrantes que se trasladan desde su pueblo natal hasta esta zona. En su caso, proviene de Santiago de Los Caballeros y es un negociante radicado en Verón.
Hernández es propietario del Mercadito La Bala. Tiene cinco años viviendo en esta localidad, pese a que duró cierto tiempo visitando y trabajando en el polo turÃstico, por cortas temporadas, para luego regresar a su ciudad. Su negocio es de venta de vegetales, vÃveres, embutidos y un almacén de venta al por mayor.
Hernández también posee otro negocio con las mismas caracterÃsticas, pero en sociedad con un hermano suyo, en otra área de Verón. Asegura que le ha ido muy bien, debido a que no vende bebidas en su establecimiento comercial, sino solo suministros alimenticios.
Precisa que todos los pequeños y grandes negocios que venden alimentos le compran a él, por los precios que tiene y porque adquiere los productos directamente en los campos.
Hernández dice que se trasladó desde Santiago hasta Verón-Punta Cana, porque parte de sus hermanos vinieron para acá hace ya mucho tiempo. Una de sus hermanas fue la primera en llegar, y más adelante sus hermanos vinieron de visita y a conocer la zona, que vieron se prestaba para hacer buenos negocios.
Nosotros aprendimos a negociar con nuestra madre, que tenÃa ventorrillos en Santiago, y con nuestro padre, que era mayorista de caña. Como vimos que aquà hacÃa falta negocios comenzamos con este, que es de lo que más se vende, porque la comida hay que comprarla obligadoâ?, asegura.
Hernández señala que todo el que viene a esta zona lo hace con la visión de trabajar y de buscar dinero, para mandarle a quienes dejó en su pueblo. â??En el punto del paÃs donde se están moviendo los pesos es aquÃ; es un lugar donde la delincuencia es mÃnima. No como los demás pueblosâ?, precisa.
Hernández se encuentra viviendo en esta zona con su esposa y dos hijos. Sus demás proles, que son de un matrimonio anterior, viven en los Estados Unidos. Asegura que conoce otras personas de su pueblo que también viven aquÃ, a pesar de que no tiene mucho tiempo para reunirse con ellos, por las extendidas horas que invierte en su trabajo.
Señala que la mayorÃa de las personas que visitan su negocio no son de aquÃ, sino que provienen de otros pueblos del paÃs. Dice que conoce a muchos que son del Cibao, que sus padres vinieron y ya los hijos nacieron aquÃ.
â??Yo vine aquà 20 y pico de años atrás, porque yo soy maestro constructor. En ese tiempo, era albañil de terminación y trabajé en un hotel que estaban construyendo, y venÃa y me ibaâ?, precisa.
Alberto Félix
Ya con 18 años de vivir en Verón, Alberto Félix es un motoconchista de la parada del Cruce de Verón, quien a su llegada a esta zona trabajó durante cierto tiempo en una casa de familia. A su salida de ese empleo, empezó a conchar para ganarse la vida.
Muchos conocen a Félix como â??Cangrejoâ?. Tiene 14 años ofertando sus servicios de transporte en su motor, y es oriundo del municipio de Enriquillo, provincia Barahona. Vino a vivir a esta zona porque un familiar suyo vivÃa aquà y decidió venir a probar suerte en este pueblo, porque asegura que en el suyo â??hay que comer, pero no hay dineroâ?.
Tengo mi esposa y mis tres hijos viviendo aquÃ, conmigo. Además de conchar, Félix es el presidente del Sindicato de Motoristas de Verón. Asegura que está a cargo de unos 244 hombres que pertenecen al sindicato. â??Aquà he conocido muchas personas de mi pueblo, y de otros pueblos que también son buenos amigos mÃosâ?, dice Félix.
Otra labor que desempeña es la de vicepresidente de la Junta de Vecinos de Villa Playwood, lugar en el que vive desde que vino a esta localidad. Félix, de 50 años, explica que ya conoce muchas historias de este pueblo.
Dice que todo el tiempo ha conchado en la misma parada del Cruce de Verón, donde en total trabajan unos 25 motoconchistas. Exhorta a los ciudadanos que si tienen algún tipo de inconveniente con uno de los que allà trabajan y que forman parte del sindicato, que se acerquen a la directiva, para resolverlo dentro de esta organización.