PUNTA CANA. La provincia La Altagracia es rica en producción de carne, leche, arroz, víveres y demás rubros, pero pese a esto sus productos no son aprovechados por la industria hotelera más grande e importante del país.
El Distrito Municipal Turístico Verón-Punta Cana, perteneciente a La Altagracia, es una localidad de gran esplendor, debido a que recibe poco más de seis millones de turistas al año. Además de que cuenta con 48 mil habitaciones hoteleras, repartidas en Punta Cana, Bávaro, Cabeza de Toro y Uvero Alto.
Los productos que se consumen en la zona hotelera son provenientes de otras localidades del país, y no de áreas circundantes. Por ejemplo, en el Distrito Municipal las Lagunas de Nisibón se cultiva arroz, en unas 8 mil tareas sembradas de este cereal.
En Nisibón también se produce leche. Mientras que en la comunidad de Santana, Higüey, se produce tocino y longaniza. Todos estos productos terminan en mercados locales y en ocasiones llevados fuera de la provincia para ser vendidos a otras localidades.
La Asociación de Ganaderos de Nisibón (Agani) agrupa a más de mil productores de carne, leche y víveres. Su presidente, Manuel Eusebio Castillo, destaca que ellos están inscritos en el clúster turístico de esta zona, pero que como asociación no suplen a la zona hotelera, pese a que están interesados en serlo.
Castillo dice que para desarrollarse y poder suplir a clientes locales y exportar sus productos, necesitan “que el Gobierno se apiade de los caminos vecinales y que nos defienda con una competencia desleal, que siempre ha existido, donde un importador en un minuto gana millones de dólares poniéndonos a nosotros (los productores locales) de rodillas”. El presidente de Agani dice que esa competencia los pone al borde incluso de desaparecer.
ARROZ
Zacarías Ruiz, presidente de la Asociación de Agricultores y Regantes de Las Lagunas de Nisibón, señaló que ellos agrupan alrededor de cien productores de arroz. Según Ruiz, en esa localidad se manufactura por encima de 30 mil quintales de arroz dos veces al año, durante marzo-mayo y junio-octubre. Destaca que no suplen a los hoteles. “Nunca hemos sido suplidores; no hemos hecho compromiso con ellos nunca”.
La mayor cantidad de ese arroz va hacia el Cibao. “Es doloroso decirlo, pero es una realidad”, destaca Ruiz, quien también precisa que los compradores vienen y adquieren el arroz por fanegas. En Nisibón hay una factoría, ubicada en Los Maicillos, pero no tiene la capacidad para captar el volumen de arroz de esa localidad. Esta es la razón por la que según Ruiz no pueden ser suplidores de la zona hotelera, puesto que no tienen cómo almacenar el cereal que procesan para poder distribuirlo.
Detalla que de comprometerse con un hotel a suplirle arroz, deben honrar ese compromiso, y en la factoría no hay capacidad para almacenar arroz seco y así tener en existencia durante todo el año.
Para los productores de arroz de Nisibón poder suplir a la zona hotelera requieren una ampliación y reacondicionamiento de su factoría. Esto implicaría tener un silo, que es una construcción diseñada para almacenar granos y otros materiales a granel.
Ruiz explica que ellos adquirieron esa factoría a través de un préstamo de 20 millones de pesos del Fondo Especial para el Desarrollo Agropecuario (FEDA), después que el expresidente Danilo Medina hiciera una visita sorpresa a esa localidad, en el 2016.
Más adelante, afirma que tuvieron que cambiar los equipos e incurrieron en otros préstamos. También, solicitaron 10 millones de pesos al Banco Agrícola para la compra de arroz. Indica que “poco a poco” han ido acreditando pagos para reducir las deudas que tienen con esas instituciones.
LECHE
En Nisibón no sólo se produce arroz, sino también que se cría ganado de doble propósito (para carne y leche). Es por ello que allí funciona la Asociación de Productores de Leche de Nisibón (Aproleni). Faustino Rijo Cedeño, pasado presidente de esta asociación, dice que ellos agrupan a 150 productores.
En las Lagunas de Nisibón se producen alrededor de 35 mil litros de leche diario, según datos ofrecidos por Ventura Cedano Hidalgo, especialista en sanidad de leche y encargado de extensión pecuaria en el programa Megaleche en Nisibón, de la Dirección General de Ganadería del Ministerio de Agricultura.
Cedano señala que en Nisibón hay unos 230 productores de leche (incluyendo los 150 de Aproleni). Precisa que la principal dificultad que tienen para suplir a la zona hotelera, es que éstas “tienen un sistema de pago que los productores no lo resisten”.
Según Cedano, las plantas procesadoras de leche que les compran a los productores les pagan todos los jueves, porque se trata de pequeños productores. Pero recalca que los hoteles pagan en un tiempo más prolongado.
Cedano refiere que ya está aprobado el centro de acopio para poder venderle leche fría a los hoteles y cualquier institución que le interese. Dice que ya hay un financiamiento aprobado
de dos millones de pesos del Banco Agrícola y el Consejo Nacional para la Reglamentación y Fomentación de la Industria Lechera (Conaleche). Este especialista comentó que la calidad de la leche producida en Nisibón se mantiene en grado A y B, lo que indica que es de buena condición.
Según Ventura, los hoteles exigen leche grado A. “Nisibón está ciento por ciento preparado para venderle leche a los hoteles. A principios de enero, podríamos sentarnos en la mesa de negociación, pero con la prerrogativa de que ellos tienen que pagar una vez a la semana”, manifestó.
Actualmente, los principales mercados suplidos con la leche que se produce en Nisibón son las empresas de quesos Michelle y San Juan, más dos plantas procesadoras de Higüey.
TOCINO
Santo Santana Espíritu Santo, presidente de la Asociación de Productores de Tocino y Longaniza Santana La Altagracia (Aprotolonsa), manifiesta que la organización tiene 260 productores.
La comunidad de Santana vive de la producción de tocino y longaniza. “Casi todas las casas por aquí bregan con tocino y longaniza”, detalla. Cabe destacar que en esa localidad hay más de 500 familias.
Espíritu Santo refiere que semanalmente en la asociación traen 500 cerdos desde el Cibao para producir tocino, unas 75 mil libras en total. Esa carne la venden en pueblos como La Romana, Boca Chica, San Pedro, Miches, entre otros.
Los directivos de Aprotolonsa dicen que no negocian con los hoteles de Verón- Punta Cana, porque aún no cumplen con las especificaciones necesarias para poder suplir esa industria. Actualmente, Aprotolonsa se encuentra a la espera que desde el Gobierno se retome la construcción de una granja de cerdos que el expresidente Medina prometió e inició luego de una visita sorpresa a esa comunidad.
Para esa obra, ya se habían desembolsado 13 millones de pesos, por lo que se adquirió el terreno y se empezó la edificación. Pero según Espíritu Santo la promesa era construir 14 naves, comprar 250 madres de cerdas y 15 barracos.
