HATO MAYOR. Milkin Germán, un joven hatomayorense, denunció que fue desvinculado de sus labores el año pasado, cuando comenzó el proceso de vacunación por la covid-19 y se negó a vacunarse. Llevaba seis años como recolector de basuras de la Alcaldía de Hato Mayor del Rey. Germán, de 30 años, dijo que ese momento explicó a sus superiores que tenía situaciones de salud que le impedían vacunarse. Alegó tener constantes taquicardias y sofoques.
Declaró que le pusieron a firmar un documento de renuncia. Mismo que certificó inocentemente, pues no sabe leer. Testificó que, a pesar, de su caso, en la actualidad hay empleados en el Cabildo que no se vacunaron. German entiende que en su despido hubo otros factores que incidieron y nunca le fueron explicados. “Me dijeron que debía vacunarme y, me negué, porque me sentía en esos días malo de salud”, precisó. “Todavía allá hay empleados que no se vacunaron y siguen ahí. De Recursos Humanos me pusieron a firmar una carta sin yo saber leer y me decían ‘no, no es de renuncia’. Cuando mi compañera lee, ahí me doy cuenta de lo que había”, manifestó Germán. Dijo que le pagaron dos meses luego de cancelarlo y nunca recibió el pago de sus vacaciones.
VERSIÓN DEL CABILDO
Autoridades del Ayuntamiento Municipal de Hato Mayor afirmaron no tener conocimiento sobre el caso. La encargada de Recursos Humanos de la entidad edilicia, Irena Batista, dijo no tener conocimientos de que ese caso se haya dado en la presente administración. Lo mismo aconteció con el consultor jurídico del Ayuntamiento, Carlos Ubiera, quien aseveró que desconoce en su totalidad el caso. Dijo que puede ser que el trabajador desvinculado haya estado laborando de manera nominal, sin un nombramiento en sus manos, como ocurre con una buena parte de los que laboran en dicha institución.
IMPLICACIONES LABORALES
De acuerdo con el abogado laboral Blas Carela, no se le puede dar aquiescencia jurídica a una persona que no sabe leer, sin este haberle facilitado ese documento a alguien que lo lea y le manifieste lo firmado. Explica que hubo una ilegalidad. El abogado subrayó que no existe una ley, ni jurisprudencia que establezca la obligatoriedad para vacunarse. “De acuerdo a lo que establece la Constitución, ese despido se tornaría ilegal, porque ha sido interpuesto bajo la violación a ley laboral”, manifestó. El jurista también alegó que “esa persona podría interponer una demanda laboral por despido injustificado. Debieron hacerse constar de que alguien de su elección leyó la carta que firmaría, de lo contrario hay una vulnerabilidad al legítimo derecho de defensa de esa persona”.
