SAN PEDRO DE MACORÍS, RD. La falta de barandas en el recién reconstruido puente peatonal de la comunidad El Soco en San Pedro de Macorís, ha impedido que cientos de estudiantes utilicen esa estructura para llegar a la escuela.
El puente que fue sometido a una reparación por el ministerio de Obras Públicas en meses pasados, fue dejado sin las barandas que sirven de protección.
La situación preocupa a los padres de los niños y jóvenes que a diario se ven en la obligación de atravesar la autovía del Este en las proximidades del puente Guido Gil, por dónde transita una gran cantidad de vehículos a alta velocidad lo que representa un peligro para quienes tienen que pasar por ahí.
Ricardo Morla, padre de una niña que estudia en la escuela de la comunidad, dijo que cuando vieron la intervención para reparar el puente, eso les trajo alegría porque habían solicitado la reparación debido a las malas condiciones que presentaba.
Sin embargo, los trabajos se han detenido y no le han informado cuándo acudirán allí a terminar con esos trabajos. “Cada día tengo que venir a cruzar esa niña para que vaya a la escuela
porque no la puede dejar cruzar sola esa carretera tan peligrosa, y nadie viene a poner las barandas que protegen a quienes tienen que usar el puente, por ahí no pasa nadie, porque si no hay de dónde sujetarse, es un peligro subir por ahí “ sostuvo Morla.
El puente fue intervenido en el mes de mayo con el objetivo de corregir daños ocasionados por una patada en su infraestructura. Al momento de la intervención se informó que los trabajos durarían una semana y que los mismos consistían en cambio de viga y de barandas por las malas condiciones que presentaban, sin embargo, han pasado los meses y aún no concluyen con los trabajos para que la población lo pueda utilizar.
Esta situación, además de afectar a los estudiantes, afecta también a los residentes de los distintos sectores de la comunidad que se ven obligados a atravesar la autovía del Este la cual es muy transitada por vehículos que circulan a alta velocidad.
