LA ROMANA. La eliminación o el posible traslado del matadero municipal que opera en el sector Brisas del Mar en esta ciudad, es un tema que verdaderamente inquieta a los residentes de la zona, pero las autoridades municipales prefieren no hablar o “hacerse los chivos locos” y no buscar soluciones a un problema que data de largos años, porque supuestamente no cuentan con los recursos suficientes para hacer de este requerimiento algo efectivo.
Este matadero lleva más de 50 años funcionando en el referido sector. Pese a que se asentó en un tiempo donde no se visualizaba un crecimiento poblacional en la localidad de Brisas del Mar, como ocurre en este momento, la realidad es que la vida útil de este degolladero de animales colapsó hace varios años.
Actualmente opera con marchadas deficiencias, lo que genera altos de niveles de contaminación, situación que provoca incomodidad y hasta enfermedades a los que hacen vida allí.
Por las constantes denuncias del estado en que se encuentra el matadero municipal, la dirección provincial del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales ha visitado el lugar en varias ocasiones. La primera visita se realizó en el año 2014, allí se determinó que la descarga de aguas residuales del degolladero, estaban causando insalubridad y contaminación ambiental en las viviendas próximas al matadero.
INFORMES DE AUTORIDADES
Dos años después en 2016, se repitió la inspección por parte de las autoridades. En esta segunda ocasión, además de Medio Ambiente, estuvo presente el departamento de Salud Ambiental de la Dirección Provincial de Salud en esta ciudad.
Durante el levantamiento, se notaron las mismas condiciones expresadas en el informe anterior, tales como: afectación a los moradores, el errático manejo de las aguas residuales y el mal olor de éstas, en pocas palabras, los administradores del lugar hicieron caso omiso a las recomendaciones de las instituciones competentes.
En otra visita realizada el 29 de mayo del 2020 y de acuerdo al informe elaborado por Edgar Rafael Morales Nolasco, técnico ambiental de la referida institución, se determinó que las aguas generadas en los corrales de los animales estaban siendo mal manejadas.
Además, se pudo visualizar la quema de desechos en el lugar, generando una severa contaminación atmosférica, tanques que contenían un material descompuesto y la acumulación de restos orgánicos descompuestos dentro de un cuarto.
La semana pasada, este semanario junto a los técnicos ambientales Víctor Ruiz y Edgar Morales, pudo constatar la contaminación e insalubridad que emana este matadero municipal.
“En esa visita, comparada con encuentros anteriores, se determinó que el manejo de las aguas de los corrales sigue siendo deficiente, además de que a los filtrantes y sépticos no se le están dando los mantenimientos periódicos que son requeridos”, puntualizó Morales.
Agregó además que el terrero donde opera este matadero está saturado y desde que hay un derrame de agua, por muy pequeño que sea, se mantiene de forma superficial. “Porque ya ese suelo no tiene la capacidad de retención, cincuenta años descargando aguas ahí, es imposible que ese piso absorba el líquido ya”, dijo el técnico ambiental.
CONTINÚAN LAS QUEJAS
Es por todos estos males, tales como: la contaminación, la insalubridad y el constante derramamiento de aguas residuales, que la comunidad pide a gritos a las autoridades municipales que intervengan este matadero o que lo trasladen a otro sector que no esté poblado.
Una de las personas que hace esta petición es Edward Sulivan, quien tiene tres años residiendo en el sector Brisas del Mar. Dice que sirvió de intermediario para vender un terreno próximo al matadero a un amigo suyo y ahora la situación es que, los administradores del lugar, hicieron una especie de séptico en la referida propiedad privada y ahora toda esa agua contaminada se acumula allí y el hedor es insoportable.
“Ellos lo que hacen es que matan los animales en la madrugada, cuando el agua sale a esa hora, nadie lo ve, pero el mal manejo provoca contaminación y malos olores. Nosotros no sabemos ya de qué manera enfrentar esta situación porque esa gente se creen los dueños de todo esto aquí”, precisó.
Otro de los moradores que le afecta esta situación es a la señora Lisbety Cedano Paulino. Ella tiene un negocio de venta de comida, que está justo detrás de este lugar, que es utilizado para el desolladero de animales. La comunitaria asegura que, su cisterna amanece llena de sangre de animales todas las mañanas.
Luilly Moreno, quien es hijo del administrador del matadero municipal y tiene doce años trabajando en el lugar, reconoció que las condiciones en la que opera el matadero deben mejorar. Sin embargo, agregó que, si se trata de eliminar esta fuente de empleo, más de doce personas que laboran allí de forma directa perderían el sustento económico con el que mantienen a sus familiares.
Añadió que “el descontento más grande de los residentes puede ser la de las aguas residuales, pero se está trabajando para hacer una planta de tratamiento a dichas aguas”, dijo. Pero mientras, tanto todo sigue igual.
POSTURAS CONTRARIAS
Las autoridades municipales en más de una ocasión se han referido al tema del matadero. Sin embargo, han tenido posturas diferentes en el manejo de la situación. Unos aseguran deben participar todas las autoridades de forma mancomunada para el posible traslado y otros indican que es necesaria la intervención del Gobierno central.
El regidor Osvaldo Cruz Báez, en representación del Concejo de Regidores del Ayuntamiento del municipio cabecera, indicó que “para nosotros poder mover ese matadero de donde está debemos hacer una mancomunidad entre el municipio de Villa Hermosa y el distrito de Cumayasa porque no tenemos terrenos disponibles para esa área y no podemos hacer ningún tipo de traslado y modificaciones sin la anuencia de esas autoridades”, precisó el concejal.
Diferente a esta postura, el director del distrito municipal de Cumayasa, Victoriano Gómez, Junta Distrital ubicada a unos pocos kilómetros de donde está localizado el matadero municipal, indicó que lo que se debe hacer es pedir la intervención del Gobierno, debido a que ni los ayuntamientos ni las juntas distritales tiene la capacidad económica para mudar ese matadero o hacer uno nuevo. “Tiene que ser el Gobierno porque son varios millones que se requieren para eso” dijo el director de Cumayasa.
Gómez aseveró que de ser trasladado, no hay un lugar en la zona de Cumayasa que no tenga viviendas, todo está poblado, por lo que desplazarlo sería prácticamente imposible. Asegura que la mejor opción sería remozarlo. “Yo lo que creo que ahí deben hacer un matadero moderno y dejarlo en ese lugar porque un matadero moderno no le va a afectar a nadie. Además, deben de hacerle una planta de tratamiento para las aguas residuales y eso tiene que ser el Gobierno” subrayó.
