Cada día la epidemia de los accidentes de tránsito está cobrando más vidas en el país. La cifra de 35 personas fallecidas por esta causa durante las festividades de Navidad y Año Nuevo debe motivar a una revisión.
Y es que la República Dominicana sigue ocupando los primeros lugares entre los países que más colisiones registran anualmente en el mundo y donde más personas pierden la vida por estas razones.
En el distrito municipal Verón-Punta Cana, según el departamento de Procedimientos de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett), ocurrieron alrededor de 2,140 accidentes, entre enero y diciembre del 2021. Estos choques dejaron un saldo de 48 muertos y 221 heridos.
Las autoridades deben tomar cartas en el asunto y de una vez y por todas crear campañas que lleven a un manejo responsable por parte de los conductores. Las medidas deben ser más drásticas de lo acostumbrado para que puedan surtir el efecto esperado.
Lo más importante es que la población tome conciencia sobre lo que ocurre y se eduque para que podamos contrarrestar lo que está pasando. Los accidentes de tránsito están llevando luto a los hogares dominicanos y es tiempo de pararlos.
El reto de las autoridades es implementar políticas públicas orientadas a la reducción significativa de estas cifras mortales, tomando en cuenta que el año está iniciando y vendrán fines de semanas largos producto de los días feriados, y asuetos como el de Semana Santa, en los que ni una persona más merece morir en las vías de nuestro país.
Debemos detener las colisiones a tiempo, antes de que todo se nos salga de las manos y no haya nada que se pueda hacer. Es momento de sentarnos en la mesa y dialogar al respecto.