Fausto Adames / Fadames@editorabavaro.com
BÁVARO. Para cualquier persona o país, salir de un lugar o posición de ninguna manera representa el fin del mundo, pero si se ha tomado esa decisión se debe saber que se enfrentará a ciertos retos, a los cuales deberá buscar la manera de superarlos, pues si no tendría que aceptar la incertidumbre que encierra la decisión tomada.
Todavía es difícil determinar si la salida del Reino Unido de la Unión Europea (Brexit) afectará o no sus relaciones comerciales con la República Dominicana, sobre todo porque el plazo de esta decisión podría extenderse hasta dos años.
Sin embargo, el propio Banco de Inglaterra ha advertido en un nuevo informe que la salida de Unión Europa podría causar una «aguda devaluación de la libra esterlina de hasta un 20%», y comprometer el crecimiento económico del Reino Unido.
De este planteamiento, se podría advertir un descenso en la cantidad de visitantes y de los más de US$154 millones en divisas que generan los turistas ingleses que visitan el país a corto plazo por la devaluación de la moneda inglesa.
Tomando en consideración el limitado intercambio comercial entre el Reino Unido y la República Dominicana, así como el plazo que implicará poner en funcionamiento la salida del Reino Unido de la Unión Europea, se podría estimar que el Brexit tendría un impacto económico significativo en la RD a corto plazo solo en el sector turístico por la caída de la libra esterlina.
Esto así, porque de acuerdo con datos aportados por el Banco Central, en el 2015 143,625 turistas visitaron al país desde el Reino Unido, lo que equivale al 2.6% del total de turistas que arribaron a la República Dominicana el año pasado, generando divisas por aproximadamente unos US$154 millones.
No obstante, según el Banco Central como secuela del Brexit, es probable que se produzca cierta fluctuación temporal del turismo proveniente del Reino Unido, debido a las posibles condiciones adversas que se pudiesen presentar en ese país.
Sin embargo, los efectos para el sector turístico, que creció en 8.9% en el 2015, no serían de una magnitud considerable, dada la diversificación de la procedencia de los turistas, mayoritariamente desde los Estados Unidos, Canadá, otros países de Europa y Sudamérica.
Lo cierto es que el intercambio comercial entre nuestro país y Reino Unido representó más de US$1,845 millones en los últimos 5 años y sobrepasó los US$255 millones el año pasado, suma que, de acuerdo con el Centro de Exportación e Inversión (CIE-RD), US$131 millones corresponden a las exportaciones dominicanas, lo que arroja un saldo levemente favorable para el país.
Por lo demás, en el 2015, las exportaciones de bienes de República Dominicana hacia Reino Unido representaron 1.8% del total exportado, equivalentes a US$169.8 millones. De estos, US$106.5 millones corresponden a bananos y plátanos, siendo el país un proveedor importante de este producto orgánico, y unos US$6 millones en mangos y aguacates, entre otros.
En el caso de las importaciones, estas representaron un 0.89% del total del año pasado, ascendiendo a US$149.7 millones, continuando el saldo comercial favorable para la República Dominicana que se ha venido registrando desde el 2010 a la fecha.
A su vez, en el período 2010-2015, el flujo neto de inversión extranjera directa (IED) desde Reino Unido al país acumuló US$90.5 millones, representando un 0.7% del total neto de la IED percibida por la República Dominicana en ese quinquenio.
Como se infiere de lo anteriormente planteado, el proceso del Brexit no afectaría significativamente la economía dominicana, porque por un lado, los flujos comerciales entre República Dominicana y Reino Unido son relativamente bajos, y por el otro, todos los acuerdos comerciales mantienen su vigencia hasta que los mismos sean renegociados en el proceso transición previsto en alrededor de dos años.
De ahí que más bien, el Brexit podría en cierto modo representar una oportunidad para que el país amplíe sus relaciones comerciales y nichos de mercado, tanto con la Unión Europea como con el Reino Unido.
Pero en cuanto al turismo, habría que ver cómo el sector podría incrementar los flujos de visitantes de otras naciones para compensar la pérdida de turistas por la caída de la libra esterlina que ha traído el impacto del Brexit.
]]>