ARGENTINA.- Anoche, dos imágenes impactantes dieron la vuelta al mundo durante el partido en el que Argentina venció 1-0 a Colombia para ganar la Copa América por segunda vez consecutiva. La primera imagen fue la salida de Lionel Messi, el capitán argentino, quien por primera vez en ocho finales internacionales tuvo que abandonar el campo debido a una lesión en su tobillo derecho.
Messi se torció el tobillo después de una jugada dentro del área, lo que lo llevó a dejar el juego a los 35 minutos del primer tiempo. A pesar de los esfuerzos del equipo médico argentino durante el entretiempo, que incluyeron vendajes y tratamientos, Messi no pudo continuar y fue sustituido en el minuto 66.
Según los expertos, la lesión de Messi parece ser un esguince moderado, que afectó los ligamentos internos de su tobillo. Aunque la situación es preocupante, Messi pudo caminar con ayuda después del partido, lo que sugiere que la lesión, aunque grave para hacerlo salir del campo, podría no ser tan severa como inicialmente se temía.
Además, los especialistas destacan que Messi necesitará entre tres y seis semanas de recuperación, sumándose a preocupaciones previas por su estado físico debido a una lesión menor en los aductores durante la fase inicial del torneo.
Al final del partido, Lencina elogió la determinación de Messi, destacando que «él no saldría de una final a menos que esté completamente incapacitado». Añadió que estaba seguro de que Messi siguió todas las indicaciones médicas durante el entretiempo para intentar regresar al juego, lo cual considera un ejemplo único en un deporte donde muchos jugadores optan por no arriesgar si tienen alguna molestia.
