Danilo concluye con altas y bajas en materia deportiva en La Altagracia

Redacción El Tiempo / redaccion@editorabavaro.com

PUNTA CANA. Este 16 de agosto iniciará un nuevo mandato presidencial, donde Danilo Medina se despide de su primer período iniciado en agosto del 2012 y jurará por una nueva administración que concluirá en el 2020.

A propósito de esta fecha histórica, es propicio hacer las evaluaciones y pasar revista sobre el desempeño de las instituciones del Estado en la provincia La Altagracia.

El Ministerio de Deportes, bajo la dirección del doctor Jaime David Fernández Mirabal, termina un período con luces y sombras en La Altagracia. Entre los puntos positivos de Fernández Mirabal se enumera el rescate de las instalaciones deportivas del utilitario, detrás de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, recinto Higüey (UASD-Higüey), la cancha Luciola Pion, el remozamiento del play frente a la fortaleza, y la habilitación de un pabellón de combate en las instalaciones del Instituto Nacional de Estabilización de Precios (Inespre), en el municipio cabecera.

Ese mismo programa se extendió a la zona turística de Verón-Puna Cana, donde se rescató de la arrabalización el Complejo Deportivo Verón, y se construyó una cancha del Futsal y Balonmano. De igual forma, se habilitó un pabellón de boxeo, acción que cambió la historia de decenas de niños y jóvenes, quienes practicaban dicha disciplina debajo de un árbol y entre sogas.

A esto se le suma la realización de los juegos municipales de San Rafael del Yuma y de múltiples actividades en Las Lagunas de Nisibon, que tenían la intención de desarrollar el balonmano, el voleibol y el fútbol en playa.

Pero no todo fueron luces. La gestión de Jaime David Fernández Mirabal también estuvo matizada de decisiones arbitrarias y un enfrentamiento de nunca acabar con dirigentes deportivos de La Altagracia, especialmente en el municipio cabecera.

Tal es el sonoro caso de la remoción de las gradas del polideportivo Leo Tavárez, acción que encontró la oposición de los principales actores del baloncesto de esta provincia, y que desencadenó un polémico enfrentamiento que dejó como resultado la declaración de â??Persona No Grataâ?, por parte del Consejo de Regidores del Ayuntamiento Municipal.

Para los próximos cuatro años, La Altagracia necesita un apoyo sustancial que impulse y desarrolle deportes como el fútbol y otras potenciales disciplinas acuáticas, pero al mismo tiempo requiere de una clase deportista empoderada que procure los mejores intereses de la sociedad.