viernes, octubre 11, 2024
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Rincón histórico: Cosas de la misa

Rincón histórico: Cosas de la misa

Antonio Cedeño(Macho) | machocedeno@hotmail.com
Cuando llegó se dirigió a la iglesia San Dionisio, donde recibió los saludos sacrosantos de la curia y escuchó un Té Deúm, en su honor, oficiado por el sacerdote higüeyano, Bernardo Montas, quien cuando ejercía su ministerio de sacerdote en Hato Mayor del Rey, vio las huestes de la soldadesca norteamericana, dirigida por el teniente Trujillo, castigar un joven seglar de la parroquia, que ayudaba en los oficios religiosos, en la iglesia de Hato Mayor, el cual confundían con alguien que era de los denominados gavilleros -patriotas. Atado por los brazos, uno a un caballo, otro al otro caballo, otro atado a una pierna y la otra pierna, atada a otro animal, era conducida por un soldado que se encargaba de hacerlas caminar; perdían las extremidades superiores y las piernas en iguales direcciones opuestas, hasta que se desprendían descuartizadas, de su base; el padre Bernardo Montas, recurrió al segundo teniente en procura de clemencia, ahora allí, con la asistencia de los feligreses que al escuchar las campanas tañir, sabían que había misa y fueron a la iglesia, más los empleados que enterados por los correos de boca a boca; pues no había teléfono, ni medio de comunicación alguna que no fuera la más antigua, colmaron la iglesia y asistían a conocer y ver de lejos tan distinguido visitante; para el padre Bernardo Montás estaba allí, esperando ser beneficiado con la santidad de una misa a su favor. Trujillo vio al padre Montas, y recordó aquel sacerdote delgado, joven, de pelo lacio, que se escapaba a través del bonete de la coronilla de la cabeza, hacía la frente pidiendo clemencia a favor del patriota acusado de gavillero, como hijo del Dios Hijo, y cuyos ruegos fueron desatendidos, por el militar que ordenaba el descuartizamiento.]]>