La región Este despide un 2021 sin grandes obras que exhibir y con los mismos problemas de hace 20 años. Carreteras destruidas, hospitales desbaratados, sistemas cloacales inexistentes, mataderos que son focos de contaminación, cementerios llenos y casas de la cultura en total abandono. Ojalá el próximo año la suerte sea mejor y nos toque ver al menos, la materialización de algunas de esas obras.