VERÓN. El futbolista Cristiano Ronaldo ha movilizado a sus abogados para tratar de frenar la difusión de una serie de documentos relacionados con las acusaciones de agresión sexual que realizó en su contra una modelo llamada Kathryn Mayorga en 2009. El periódico The New York Times ha solicitado ahora al departamento de la policía metropolitana de Las Vegas, donde tuvo lugar la supuesta violación en una habitación de hotel, que haga público el informe de la investigación amparándose en la ley de registros públicos del estado de Nevada.
El equipo legal del deportista se opone radicalmente y alega que esos archivos contienen información confidencial que habría sido obtenida de forma ilegal por la presunta víctima para proporcionársela a las autoridades en 2018, en un intento por conseguir que se reabriera el caso.
Inicialmente ambas partes llegaron a un acuerdo para evitar un enfrentamiento en los tribunales y la demanda presentada por Mayorga no trascendió públicamente hasta 2017, cuando fue sacada a la luz por el periódico alemán Der Spiegel basándose en pruebas obtenidas por el portal de filtraciones Football Leaks.
Un año más tarde la modelo alegó que había sido presionada para aceptar una importante suma de dinero a cambio de su silencio y de destruir todas las pruebas que pudieran relacionarla con Cristiano, y trató de anular dicho acuerdo usando los documentos obtenidos por Football Leaks.
Su petición fue desestimada por un juez el pasado mes de octubre debido precisamente a la forma en que su abogado había obtenido esos mismos documentos, que sin embargo aún se conservan entre todos los papeles del caso. Cristiano quiere evitar que sean publicados por The New York Times porque incluirían conversaciones privadas con sus asesores legales y documentos robados.