VERÓN. A muchos les sorprendió que Kanye West acudiera a apoyar a su ex Kim Kardashian cuando ella presentó el programa ‘Saturday Night Live’ hace unas semanas porque, en teoría, la celebridad había iniciado los trámites para poner punto final a su matrimonio el pasado mes de febrero, pero resulta que el resto del mundo estaba equivocado.
Según su versión de los hechos, el rapero aún no ha recibido ningún documento que demuestre que su aún esposa -al menos a ojos de la ley- ha presentado una demanda de divorcio e insiste en que él no se toma a broma la idea de romper su familia.
«‘SNL’ hizo que mi esposa dijera que se estaba divorciando de mí en televisión porque querían aumentar los números de audiencia… Y yo no he visto ningún papel, ni siquiera estamos divorciados», ha asegurado él en el programa ‘Drink Champs’. «Mis hijos quieren que sus padres sigan juntos. Yo quiero que sigamos juntos», ha añadido.
En opinión del polémico músico, la presión mediática ha sido en gran parte la responsable de su crisis matrimonial porque tiene la impresión de que nadie quería que siguieran juntos. Como ejemplo, no duda en mencionar a su antes amigo Drake, quien en su opinión insinuó que había mantenido relaciones sexuales con Kim en sus canciones aunque no fuera cierto, y él no dudó en reprochárselo en un chat de grupo del que también formaban parte Kid Cudi, Pusha T, Travis Scott y Jay-Z.
«Hablé con Drake y él me dijo que nunca se había acostado con Kim, y le respondí que el problema era que había actuado como si sí lo hubiera hecho. ¿Se puso acaso en contacto con ella? El problema era todo lo demás alrededor del asunto, no era tanto el hecho en sí», ha señalado.
Pese a los rumores que afirman que su ex podría haber pasado página con el humorista Pete Davidson, con quien protagonizó un sketch en ‘SNL’ en el que ambos se besaron, Kanye no pierde la esperanza de que puedan reconciliarse y ha hablado con su pastor acerca de cómo podrían reconstruir su relación.