LA ROMANA. La Fundación Hogar Betesda (Casa de misericordia) ha servido de amparo por 18 años a más de 500 niños, los cuales han recibido techo, alimentación, educación y sobre todo amor.
El pastor Ramón Castro fundador, junto a su esposa Ludis Esther Rivera Muñoz de Castro sintieron el llamado de Dios de formar un hogar de acogida para los niños huérfanos y otros desamparados.
Según expresan, todo inició cuando albergaron a un niño de apenas tres meses de nacido y desde entonces han seguido recibiendo niños de hasta 45 días de nacidos, algunos de los cuales, son adoptados. Tal es el caso de uno de los niños que después de grande, fue adoptado hace 3 años por una familia de alemanes, quienes lo llevaron a vivir con ellos.
Castro sostiene que la forma de acogida en el hogar para los menores se produce, principalmente, vía referimiento del Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani) y el Tribunal de Menores Niños, Niñas y Adolecentes.
Manifiesta que los niños vienen de familias disfuncionales destruidas por los estragos del pecado, en otros casos llegan porque el padre o la madre no cumplen sus roles. Muchos de ellos son huérfanos de padres muertos y otros de padres vivos, parece un contra sentido, pero en estos tiempos es así, dijo el fundador del hogar.
Precisa que muchos padres desisten de sus obligaciones paternas y abandonan a los hijos bajo el alegato de que no los pueden criar, tanto en el aspecto económico, moral y espiritual, y que los menores al llegar al hogar traen secuelas por las diversas formas de abusos, maltratos y rechazo de la sociedad que los destruyen aún más.
El pastor enfatiza que los niños continúan la escuela, y que, a su retorno, tienen un reposo, luego realizan las tareas, también aprenden el arte culinario y la música, practican deportes, juegos y paseos fuera del recinto en algunas ocasiones. Además, son instruidos en la palabra de Dios, llevándolos a la iglesia.
NECESIDADES Y PROYECTOS
Entre sus necesidades, la fundación cito la adquisición de un autobús más grande ya que el que tienen actualmente no es suficiente para la movilidad de los infantes. De igual manera, la entidad tiene proyectado albergar a 100 niños con la construcción de un edificio en los terrenos restantes del hogar con la ayuda de patrocinadores.
Dijo, además, que la obra social que realizan es en base a actividades como una cena pro fondos para este sábado 16 de diciembre, ya que no reciben ninguna ayuda estatal.
Reveló que el proyecto se sustenta con la colaboración de personas altruistas, instituciones, ministerios y un grupo de voluntarios compuesto por 25 personas profesionales de la salud, educación, derecho y otras áreas y también con el trabajo de seis colaboradores fijos que brindan apoyo a los niños del hogar.
