PUNTA CANA. Guillermo Ochoa ha sido uno de los jugadores más criticados en la Selección Mexicana de Futbol. El guardameta apareció en el momento cuando más lo necesitaban y cuando muy pocos confiaban en él. En el partido que mantuvieron México y Polonia, correspondiente al Grupo C en Qatar 2022, Ochoa paró un penal a Robert Lewandowski y el estadio estalló en júbilo.
En un mundial donde el VAR no perdona nada, el árbitro central pitó la pena máxima tras un jaloneo entre Héctor Moreno y Tito Lewandowski. El colegiado fue al VAR, revisó la jugada y no dudó en darle el beneficio de los once pasos a los polacos. El jugador del FC Barcelona puso el esférico en la mancha de cal, respiró profundo y un engrandecido cancerbero mexicano paró el disparo.
No es sorpresa que Paco Memo se muestre en las copas del mundo, tal y como lo hizo en Brasil 2014 contra el anfitrión y Rusia 2018 durante los partidos de la fase de grupos. Una vez más, el guardameta del Club América se hizo presente con una atajada de antología.
Ochoa se convirtió en leyenda luego de iniciar como titular en el cotejo ante Polonia. El guardavallas jugó su quinto mundial en su historia y se unió a un exclusivo listado de futbolistas que han logrado tal hazaña: Antonio Tota Carbajal, Rafael Márquez, de México y Lothar Matthäus de Alemania y Gianluigi Buffon de Italia. Recientemente, Lionel Messi se sumó al grupo y próximamente Cristiano Ronaldo también lo hará.
De ese modo, Guillermo Ochoa detuvo un penal a uno de los mejores delanteros del mundo, que no es poca cosa. Cuando la seguridad no estaba depositada en el portero mexicano apareció para demostrar que México tiene una ventaja en el arco.
Para mala fortuna de sus detractores, Ochoa tuvo una de sus mejores noches. Recientemente, Javier Aguirre, director técnico del Tricolor en Sudáfrica 2010 y Corea-Japón 2002, declaró previo al partido que la única pieza que movería en el esquema de Gerardo Martino sería el portero. Hoy, Guillermo Ochoa ha callado la boca de los más pesimistas.