PUNTA CANA. Después de hacer el seguimiento de los pacientes que se recuperaban de un ataque cardíaco, los investigadores descubrieron que el tratamiento con una polipíldora resultó en un riesgo significativamente menor de eventos cardiovasculares adversos importantes que la atención habitual.
Cabe destacar que las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte a nivel mundial. En 2019, 17,9 millones de personas murieron a causa de estas enfermedades, lo que representa el 32 % de todas las muertes a nivel mundial. De estas muertes, el 85% se debieron a infartos y accidentes cerebrovasculares.
Por lo general, después de que un paciente se recupera de un ataque cardíaco, los médicos prescriben varios medicamentos para prevenir problemas cardíacos adicionales en el futuro. Estos medicamentos cardiovasculares generalmente incluyen tres medicamentos; un agente anticoagulante como la aspirina, una estatina para reducir el colesterol y un inhibidor de la ECA para reducir la presión arterial.
Los investigadores combinaron los tres medicamentos en una sola píldora y probaron 50 variaciones para llegar a la receta correcta que sería la más beneficiosa. Para probar la polipíldora, un equipo de investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) de España reclutó a 2.499 participantes de siete países. Los participantes se reclutaron después de un ataque cardíaco y se aleatorizaron para tomar Trinomia o una terapia estándar, lo que implicó tomar cada uno de los medicamentos por separado.
