China iniciará este jueves una serie de operaciones y ejercicios militares con los que rodea a Taiwán, en represalia a la visita de Nancy Pelosi a la isla, unas maniobras con fuego real que son tomadas como un ensayo del Ejército de lo que sería una guerra en la zona.
El régimen, que había amenazado con “medidas resueltas y firmes” si la titular de la Cámara de Representantes de EEUU concretaba la visita, anunció que las maniobras militares tendrían lugar en las aguas y el espacio aéreo cerca de Taiwán, y que incluirían el uso de munición de largo alcance en el estrecho de Taiwán.
En un reporte inusualmente detallado, la agencia oficial Xinhua informó las seis zonas de las maniobras, esparcidas para rodear efectivamente a la isla desde este jueves hasta el domingo, incluyendo el cierre del espacio marítimo y aéreo para esas áreas.
El mapa muestra que las prácticas estarán a solo 20 kilómetros de la costa de Kaohsiung, la principal ciudad del sur de Taiwán. Así, todas se extenderán hasta bien entrada la Zona de Identificación de Defensa Aérea de Taiwán y en tres casos invaden el espacio aéreo territorial de la isla, un área reconocida por el derecho internacional que se extiende 12 millas náuticas (22,2 kilómetros) desde la costa. Además, tres están ubicadas al este del territorio, lo que la aísla del Pacífico.
Por ello, el Ministerio taiwanés de Defensa denunció la grave violación de las aguas territoriales y de su soberanía, no reconocida por China. “Esta es una acción irracional que desafía el orden internacional”, destacó el ministro Sun Li-fang. Según describió, los ejercicios equivalen a un “bloqueo marítimo y aéreo” de Taiwán y la cartera señaló que las maniobras son un “esfuerzo unilateral para socavar la paz y la estabilidad regionales”. Pero advirtió que las fuerzas taiwanesas “responderán a cualquier acción”.
Infobae